Diciembre ha sido el mes con mayor número de bajas de EE UU
El mes de diciembre ha sido el más sangriento para las tropas de Estados Unidos en Irak en los últimos dos años, después de que el mando militar estadounidense informase ayer de la muerte de otros seis soldados, lo que acerca la cifra total de bajas mortales a la emotiva cifra de 3.000 desde que comenzó la guerra. Las organizaciones pacifistas preparan numerosas protestas contra la guerra para cuando se alcance esa cifra.
Tres marines murieron el jueves de las heridas recibidas en combate en la provincia de Anbar, y otros dos más el viernes en la misma provincia. Otro soldado murió también el viernes al estallar una bomba en el suroeste de Bagdad.
Los últimos muertos elevan el número de bajas desde la invasión en marzo de 2003 a 2.998. El número de muertos en diciembre aumentó ayer a 109, la cifra más alta desde noviembre de 2004, cuando 134 soldados resultaron muertos.
Unas 140 manifestaciones en 37 estados han sido convocadas para marcar los 3.000 muertos en Irak. Nancy Lessin, cofundadora de Familias de Militares, dijo que "este horrible y trágico hito de los 3.000 nos permite recordar la sangría que sufre este país por una guerra que no debió empezar".
Los sondeos de opinión muestran que la guerra de Irak se ha convertido en un tema cada vez más impopular entre un público que inicialmente la apoyó.
El descontento de los votantes fue el factor clave que determinó la victoria del partido demócrata frente al partido republicano del presidente Bush en las elecciones parlamentarias del pasado noviembre.
Hasta ahora, el descontento no se ha traducido en grandes manifestaciones contra la guerra, que sólo han atraído a un puñado de activistas. Familias Militares, organización que cuenta con 3.100 miembros, está coordinando sus protestas con Veteranos de Irak contra la Guerra, un grupo de veteranos y soldados en activo, y con otras organizaciones.
