Directivos de Air Madrid plantean que el dueño les ceda la propiedad para volver a volar

El gerente de Air Madrid, Pablo Morera, anterior director de operaciones, explicó ayer a este diario que "los trabajadores" de la compañía presentarán hoy un plan de viabilidad al Ministerio de Fomento con la intención de volver a volar el jueves o viernes próximos. La solución que plantean consiste en que el único accionista de la aerolínea, el hotelero José Luis Carrillo, ceda la propiedad a los empleados y que un grupo gestor se haga cargo de reflotar la compañía. Según Morera, Carrillo no pone objeciones, aunque aún no se han perfilado los detalles.

El plan de los directivos de Air Madrid consiste en presentar un programa a Aviación Civil para solucionar todos los problemas que han llevado a la suspensión de la licencia, de modo que puedan recuperarla en el menor tiempo posible. "Cada hora que pasa es crucial" porque la situación se vuelve cada vez "más irreversible". "Una aerolínea que no vuela está condenada a morir".

Morera explica que los trabajadores de la compañía se reunieron ayer en la sede de Alcobendas y que el "espíritu mayoritario" era de preocupación por los pasajeros que no van a poder volar a sus destinos en esta campaña de Navidad. "Lamentamos mucho esta situación y queremos contribuir a solucionarla", explica el gerente.

La cesión de la propiedad a los trabajadores no implica que éstos vayan a pagar por las acciones que tiene Carrillo. "Ahora no tenemos dinero pero eso no quiere decir que pretendamos que sea una cesión gratuita al 100%", prosigue el gerente, que insiste en que este planteamiento tiene el apoyo de los trabajadores, que intentan sacar adelante la campaña de Navidad.

Tampoco es su objetivo "ser dueños de la empresa", añade. "No seríamos contrarios a que entrasen nuevos accionistas o que haya algún proceso en paralelo a esta operación".

Sobre el interés de otros empresarios por la aerolínea, Morera afirma que no conoce nada "oficialmente", si bien ha oído los rumores de que, por ejemplo, el grupo Marsans (que encabeza Gonzalo Pascual, a su vez presidente de Spanair) ha mostrado su disposición a quedarse con Air Madrid.

"Mientras no haya una resolución definitiva no se puede avanzar nada", explicó el jueves un portavoz del grupo turístico. Fuentes del sector sostienen que se da por hecho que el grupo Marsans podrían inclinarse por la compra de Air Madrid para invertir el dinero que le reportará la venta de Pullmantur a Royal Caribbean, el segundo mayor operador mundial de cruceros, que le pagará 430 millones de euros y asumirá la deuda de 270 millones del touroperador español.

Por otro lado, la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, avanzó ayer que "colaborará" para que los pasajeros cobren sus indemnizaciones, si bien no aclaró si asumirá la representación legal de los clientes ante la compañía, como hizo su ministerio con los afectados por el cierre del aeropuerto de Barcelona a finales de julio pasado. Fomento adelantó las indemnizaciones por la cancelación de vuelos y se subrogó en los derechos de los pasajeros para luego reclamar, supuestamente, a Iberia.

La ministra arremetió contra la compañía que preside José Luis Carrillo por su actuación irresponsable respecto a sus clientes. Preguntó si alguien había conseguido comunicarse con la compañía. Explicó que desde Fomento se ha intentado en retiradas ocasiones durante el fin de semana hablar con el teléfono de atención al cliente. "Sólo se oye una música", dijo Álvarez.

Además de los reiterados incumplimientos de seguridad (hasta siete veces sus aviones han visto suspendido o no renovado el certificado de aeronavegabilidad y acumulan 13 expedientes sancionadores por irregularidades en esa materia), Álvarez desgranó otras actuaciones poco serias de la compañía.

Aviación Civil tuvo incluso problemas para hacer llegar a los responsables de Air Madrid la resolución de suspensión definitiva el sábado de madrugada. Hasta la una y media de la mañana nadie se responsabilizaba de firmar la recepción del documento.

Frente a la desastrosa actuación de la compañía, Álvarez agradeció la colaboración y "lealtad hacia los ciudadanos" del resto de compañías aéreas, con cuyos responsables se reunió el sábado por la noche y de nuevo ayer a mediodía. Explicó que han aceptado ofrecer gratuitamente las plazas libres que queden en los vuelos de regreso de países latinoamericanos en enero a los afectados de Air Madrid.