El subsuelo de una zona de Barakaldo donde se harán pisos está contaminado
Un informe técnico constata la toxicidad de las aguas subterráneas
Un informe técnico ha confirmado la alta contaminación de los terrenos que ocupó la empresa Plastificantes de Lutxana en Barakaldo, donde se prevén construir más de 700 viviendas. El estudio de la empresa URS concluye que la contaminación ha llegado "al nivel más profundo" de las aguas subterráneas. Un grupo ecologista, que ha llevado el caso a un juzgado, considera ilegal la recalificación de los terrenos.
La compañía Plastificantes de Lutxana paralizó su producción en mayo de 2004 al no poder cumplir las exigencias impuestas por el Departamento de Medio Ambiente. Antes, entre septiembre y octubre de 2003, estuvo cerrada por orden de esa consejería tras causar un episodio de contaminación atmosférica que obligó a desalojar de sus hogares durante ocho días a 60 personas.
Con el cierre, el Ayuntamiento se mostró favorable a un cambio de uso de los terrenos, de la actuación calificación industrial a la residencial, que posibilitaría la construcción de 700 viviendas, el 20% de ellas de protección oficial. El desmantelamiento de las instalaciones de la fábrica concluyó en la primavera de 2005 y ahora se debe iniciar la descontaminación del suelo, como fija la ley.
Un informe del Instituto Nacional de Toxicología, solicitado por la juez de Barakaldo que investiga el caso tras la denuncia de la asociación ecologista Lur Maitea, apreció en marzo una "elevada" contaminación por lindane que "puede implicar un riesgo para la salud humana" si el suelo se utiliza para un área de juego infantil o viviendas adosadas. Una de las analíticas mostraba la presencia de 1.031 miligramos de este residuo por cada kilo de sustancia seca, cuando el máximo permitido es de 0,7.
Otro estudio posterior, de julio pasado y elaborado por la empresa URS, señala que existen productos contaminantes como el lindane u otros pesticidas, en referencia al DDD y el DDT, que proceden del material de relleno que se utilizó durante la construcción de la fábrica.
El estudio, que ha realizado sondeos de hasta 12 metros de profundidad, ha comprobado la existencia de contaminación en "el nivel más profundo de aguas subterráneas". Sin embargo, considera "mínima" la posibilidad de que esta toxicidad haya salido al exterior.
Además, ha localizado una serie de tuberías subterráneas con restos de contaminación, "lo que podría suponer la existencia de zonas afectadas que no han podido ser identificadas durante la investigación dado su carácter muy localizado".
El documento concluye que las concentraciones de contaminantes "superan los máximos aceptables para los usos residenciales previstos". En el caso de las aguas subterráneas, propone su vertido a la red de saneamiento, "directamente o tras un tratamiento sencillo de decantación y separación".
La asociación Lur Maitea ha denunciado que el desmantelamiento, que se realizó entre 2004 y 2005, fue ilegal, al igual que la recalificación. En un escrito dirigido al Juzgado de Instrucción número 4 de Barakaldo, aseguró que Plastificantes de Lutxana y una constructora firmaron un contrato privado en marzo de 2004 sobre la recalificación.
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