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ARTE

Un proyecto colaborativo ofrece una visión del territorio a través de sus sonidos

Ruidos industriales y naturales, voces, músicas y también silencios conforman Escoitar.org, un mapa de paisajes sonoros abierto a la participación del público a través de Internet

Un enjambre de abejas enfurecidas, música y voces de una verbena, el fragor de una depuradora cerca de Pontevedra y los gritos de unos niños jugando a baloncesto. Éstos son algunos de los sonidos que componen Escoitar.org, un proyecto en Internet, abierto a la participación del público, cuyo objetivo es reunir y documentar un amplio archivo de fenómenos sonoros con fines sociales, etnográficos y artísticos.

"Una aproximación al sonido de un lugar es una aproximación a su patrimonio inmaterial. Los sonidos son materias no renovables y el hecho de capturarlos y exponerlos implica percibir, comprender y concebir nuestra identidad sonora y la de nuestros lugares, con su coherencia y su idiosincrasia", afirma Chiu Longina, antropólogo de la Universidad de Cuenca y artista sonoro.

Longina, el musicólogo Juan Gil y el artista Berio Molina son los impulsores del proyecto, que se presentó con un taller en MARCO (Museo de Arte Contemporáneo) de Vigo, en La muestra invisible, abierta hasta el 21 de enero.

Escoitar.org, que ofrece una nueva percepción no visual del territorio, utiliza los mapas de Google Maps y un software de código abierto, desarrollado expresamente por Horacio González, para que la gente pueda incorporar al sistema sus archivos audio, colocándolos automáticamente en el lugar geográfico en el que fueron grabados.

"Comprender el equilibrio bioacústico de un sitio, crear retratos o postales sonoras, construir un mapa con la descripción de los lugares a través de sus características acústicas contribuyen a la construcción de la identidad de una zona geográfica. Los sonidos son un material inestimable para la comprensión de las culturas y las sociedades que los producen o los perciben", explican los autores del proyecto.

Las contribuciones han quedado divididas en siete secciones: eventos sonoros (conciertos, discursos públicos, etcétera), interacción social (ruidos urbanos y domésticos, ceremonias, fiestas), mecánicos e industriales, naturales (animados e inanimados), señales acústicas (relojes, timbres, sirenas), otros sonidos y también silencios.

Recuperación de sonidos

Los archivos audio son representados gráficamente en el mapa con un código de colores que permite programar fácilmente paseos geográficos sonoros. Contribuir con una grabación por el momento es un poco más complejo, pero pronto será suficiente elegir en el mapa el sitio donde se quiere colocar y la categoría que se le quiere atribuir. El nuevo sistema que se está incorporando se encargará de lo demás. Mientras tanto, se ofrecen consejos e instrucciones para realizar grabaciones de campo y una pequeña guía de las diferentes tecnologías disponibles, tanto analógicas como digitales.

Además de perseguir la ampliación de su biblioteca de sonidos, Escoitar.org, que está en la plataforma de difusión Artesonoro, se propone recuperar la memoria histórica y colectiva a través de la captura de sonidos en peligro de extinción, explorar espacios urbanos con características acústicas especiales, traducir al español textos relacionados con los paisajes sonoros y fomentar la escucha activa y crítica a través de talleres de limpieza de oídos.

Asimismo, se prestará especial atención a los cambios acústicos de los lugares en relación con los cambios climáticos, como el estruendo de fenómenos atmosféricos inusuales o el sonido de los lugares en diferentes estaciones del año. El sonido como arma y las técnicas de control social a través del sonido serán otros de los temas que se abordarán en los talleres organizados para difundir el proyecto, que desarrollará en varias ciudades españolas.

ESCOITAR: www.escoitar.org ARTE SONORO: http://Artesonoro.org

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