Reckitt ve "irreales" las indemnizaciones que pide la plantilla por el cierre

Los 193 trabajadores de la fábrica de la multinacional Reckitt en Güeñes, afectados por el cierre anunciado hace casi tres meses por la compañía, aprobaron ayer la plataforma de reivindicaciones para su negociación en el expediente de clausura. Exigen la recolocación del 100% de la plantilla y una indemnización mínima de 48.000 euros, además de una compensación de 100 días por año trabajado.

La propuesta fue rechazada horas después por la dirección de Reckitt, que la considera "fuera de la realidad". Anunció asimismo que rebajará su plan inicial de compensaciones debido a los niveles "muy bajos" de producción en la fábrica desde que se anunciara el cierre.

Los trabajadores piden también que las recolocaciones -en un principio se barajaban cerca de 130 puestos en seis proyectos diferentes, pero que ahora se ha quedado en sólo uno- se materialicen antes de tres meses, tiempo en el que piden seguir en la nómina de Reckitt, y reclaman el mismo sueldo y contratos indefinidos desde el principio. Un portavoz sindical indicó que la plataforma se basa en las de otros cierres de empresas extranjeras en Euskadi y que el caso de Reckitt es una "deslocalización de libro de una multinacional con cuantiosos beneficios".