"ETA está avanzando hacia la ruptura del alto el fuego"

Cándido Martínez (Bilbao, 1959), portavoz del sindicato independiente de la Ertzaintza Erne, la central que ha ganado las últimas elecciones en la policía vasca, cree que en el proceso de paz pintan bastos.

Pregunta. Han ganado, pero no han arrasado. Aun están lejos de sus contundentes resultados de 1998 (50% del voto).

Respuesta. Hay más sindicatos que nunca en la Ertzaintza. ELA ha sufrido una sangría y la aparición de dos nuevos sindicatos ha hecho que se reparta más el voto. Pero en Guipúzcoa, nuestro trabajo de cuatro años ha servido para recuperar un territorio muy difícil.

P. Pero cuatro años después, siguen siendo incapaces de movilizar a su militancia. 660 afiliados se han quedado en casa.

"ELA es el gran perdedor de las elecciones, pero su discurso parece más el de un ganador. No ha hecho nada por los 'ertzainas' en cuatro años"

"Interior se niega a hincar el diente al absentismo, histórico en la policía; al acoso laboral, la coordinación o la carrera profesional"

R. Yo no lo llamaría incapacidad. A nivel europeo, hay cierta afiliación que por algún motivo no tiene el mismo compromiso, pero hay otra gente a la que intentaremos llegar con el discurso de que Erne somos todos y que no se pueden desentender del sindicato. Es una tarea pendiente. Estamos contentos con el resultado, pero tenemos deberes para estos cuatro años.

P. Su aliado CCOO, con quien firmaron el convenio hace un año, ha retrocedido por primera vez en votos.

R. No le llamaría nuestro aliado. Es un compañero de viaje que se ha sumado a nuestras propuestas. La lectura es sencilla: no está calando en el colectivo el discurso alarmista de su líder.

P. ¿Hay posibilidades de ampliar esa unidad de acción?

R. En la mesa de negociación sólo estamos Erne, ELA y Comisiones, pero brindamos a las centrales que no están ser su voz en ese foro. Si hay coincidencia de proyectos y estrategias, podremos llegar a acuerdos con el resto de sindicatos. Pero ELA-Ertzaintza debe desligarse de los hilos que les manejan desde la confederal del sindicato. ELA no tiene independencia suficiente para llegar a acuerdos en el área de la Ertzaintza; están supeditados a lo que les dicta su confederal.

P. ¿Cómo interpretan el mensaje de ELA de que si no llegan a acuerdos más amplios, estos estarán faltos de legitimidad?

R. ELA es el gran perdedor de estas elecciones, pero ese discurso parece más el de un ganador. Y en cuatro años han demostrado su incapacidad para liderar la mayoría que lograron en 2002. No han hecho nada por el colectivo y lo han obviado. Sólo han mirado por su confederal y eso le ha pasado factura. Seguiremos tendiendo puentes. En la medida que ELA y Comisiones se quiten esas ataduras, nosotros llegaremos a acuerdos con ellos.

P. ¿Cómo analizan los buenos resultados de ESAN, la escisión de ELA?

R. Su apuesta por luchar por los intereses del colectivo ha cuajado entre la propia afiliación de ELA. Las bases de ELA se han dado cuenta de que el discurso de su dirección no va a ningún sitio. Lo vemos con interés, por ver si podemos llegar a acuerdos con ellos. Su discurso les presenta más como un aliado que como un sindicato a batir y se asentarán.

P. Euspel, la central de los berrozis [escoltas de élite], ha trastocado el mapa en Álava.

R. Tristemente, nace una organización sindical que sólo mira por sus intereses.

P. Será porque han hecho algo mal las demás centrales. Todos han retrocedido en la mesa donde votan los berrozis.

R. Algo mal no. Los berrozis son los que mejores condiciones laborales tienen en la Ertzaintza. Tienen lo suyo y lo del resto del colectivo. Sus demandas no las entiende nadie, aunque es verdad que hay una presión interna muy fuerte y al que no les vota, le castigan. Es de preocupar ese comportamiento seudomafioso, incluso con afiliados nuestros. Euspel está condenado a caer.

P. El alto el fuego parece estar cogido con alfileres.

R. Sí. Estamos preocupados por el rebrote de la kale borroka, el robo de las pistolas, lo que está pasando en Francia. Vemos este proceso con bastante preocupación. Se han lanzado demasiadas campanas al vuelo y se está hablando demasiado y no se está dejando trabajar a los políticos. La Ertzaintza, y éste es un mensaje que debe quedar claro, seguirá persiguiendo a los delincuentes. Espero que los políticos se pongan a la altura de lo que la sociedad demanda, en donde también estamos los ertzainas, y que a corto o medio plazo logremos la paz.

P. ¿En un análisis estrictamente policial, diría que ETA avanza hacia una ruptura del alto el fuego? Hay un claro rearme de los terroristas.

R. Los indicios policiales apuntan a que ETA está avanzando hacia la ruptura del alto el fuego: el aumento de la kale borroka, el robo de armas, las detenciones de estos días. Y la información y lo que pasa en Francia es que todo tiende más a que se pueda romper que a que el proceso siga.

P. ¿Qué información maneja la Ertzaintza ahora?

R. Como el resto de policías. Seguimos trabajando y expectantes.

P. ¿Están los ertzainas preparados para convertirse de nuevo en objetivo prioritario?

R. El colectivo no ha bajado la guardia. Seguimos al pie de la letra todas las instrucciones de seguridad y todo el trabajo que hacemos está acompañado de las medidas de seguridad oportunas. Ahí no hay relajo. Y seguiremos así hasta que ETA entregue las armas. En esto, la cúpula de Interior está también implicada.

P. ¿Quiere decir que en otras cosas no están implicados?

R. Cuando decimos que este es el peor equipo de Interior de la historia es porque tienen encabronados desde los mandos a la base. Son incapaces de desarrollar la carrera profesional, ahí hay un tapón claro con unos jefes sin méritos para estar donde están. O de hincar el diente al absentismo, histórico, al acoso laboral, la coordinación policial. Interior obvia nuestras propuestas para estudiar al detalle esos temas. Esperamos que reaccionen.