Ribó culpa a la Generalitat del fiasco de las adopciones en el Congo

El fiasco de las adopciones del Congo ha sido un cúmulo de despropósitos y "deficiencias" atribuibles a todos los agentes implicados: el Departamento de Bienestar y Familia, la Embajada española en Kinshasa y la entidad que las promovió, la Asociación para la Adopción de Niños de Congo (ADIC). Así concluye el informe del Síndic de Greuges sobrre el caso, que se presentó ayer.

Los afectados por esta cadena de errores son una cuarentena de familias. Siete de ellas viajaron en agosto a la República del Congo, cuya capital es Brazzaville, y a la República Democrática del Congo, con capital en Kinshasa, para recoger a sus hijos. El viaje, que tenía que durar una semana, se alargó casi un mes, ya que la Embajada española se negó a tramitar los visados para los niños adoptados porque vio irregularidades en los procesos. Tras este fiasco, se paralizaron los procesos de otras 31 familias.

En el informe del Síndic de Greuges se lamenta que la Generalitat haya dado a las familias diferentes versiones sobre el estado de sus trámites. Es el Departamento de Bienestar y Familia, según el documento, el principal responsable de la crisis como "autoridad competente".

Las críticas se dirigen a la republicana Anna Simó, que estuvo al frente de Bienestar hasta la salida de ERC de la Generalitat en mayo, y a la consejera en funciones actual, la socialista Carme Figueras, aunque las principales se centran en la etapa de Simó al frente de Bienestar, sobre todo por haber acreditado de manera provisional y sin pasar por un concurso público a la ADIC para realizar adopciones en el Congo, pese a que "no contaba con experiencia" en este ámbito. También se deplora en el informe que la entonces directora del Instituto Catalán de Acogida y Adopciones, la republicana Rosa Maria Beltran, autorizara el viaje de las siete familias adoptantes a pesar de que la embajada había advertido de que no tramitaría adopciones en las que participara la ADIC.

La Embajada española en Kinshasa también tiene parte de culpa, según el Síndic. La razón: acusó a la ADIC de irregularidades sin aportar pruebas. Respecto a la ADIC, el informe desaprueba que esta entidad sacase de los orfanatos congoleños a los niños que tenían que ser adoptados, sin autorización de la Generalitat, y los alojara en sus propias casas de acogida.

El Síndic añade que en la elaboración de este informe no ha contado con la suficiente colaboración de Bienestar y de la ADIC, extremo que negó el departamento, que reconoció ayer que si no se ha entregado la documentación por escrito es "porque los trámites evolucionan constantemente", explicó la responsable de adopciones, Gloria Langreo.

Los afectados siguen sin ver la luz al final del túnel, pese a que, según Bienestar, los trámites se acabarán en un mes. "El tiempo pasa y nuestros hijos siguen en el Congo. Están alojados en las casas de acogida de la ADIC, pero la entidad se ha quedado sin dinero y tememos por su bienestar", explicó ayer uno de los padres adoptantes, Oriol Suárez.