El déficit comercial de EE UU registra la mejora más importante en cinco años
El fuerte abaratamiento en el precio del petróleo permitió a Estados Unidos rebajar su déficit comercial un 6,8% en septiembre, hasta los 64.300 millones de dólares (50.097 millones de euros), la mayor mejora en cinco años. Y por primera vez en siete meses, las importaciones totales de bienes y servicios cayeron.
Wall Street contaba con una reducción del agujero comercial, pero no tan pronunciado. Además, se revisó a la baja la estimación para agosto, del récord de 69.860 millones hasta los 68.960 millones. Las importaciones en septiembre cayeron un 2,1%, hasta los 187.460 millones, mientras que las exportaciones subieron un tímido 0,5%, lo que no evitó que marcara un nuevo máximo de 123.160 millones.
La clave está, de nuevo, en el precio de la energía. El valor de las importaciones de crudo bajó en septiembre hasta los 19.790 millones de dólares, casi 3.000 millones menos que en agosto, a pesar de que en volumen subieran hasta los 343,5 millones de barriles. El total de la factura energética se redujo entretanto hasta los 25.800 millones, un 16% menos que en el mes de agosto.
El descenso de las importaciones puede deberse también a la desaceleración que se vive desde hace meses en la economía estadounidense, que durante el tercer trimestre fue del 1,6% del PIB, casi a la mitad de su potencial de crecimiento. Pese a la caída del déficit en general, por países, la brecha sigue creciendo con China, que ya se eleva a 22.960 millones. Sin embargo, cayó con los países de la zona euro, México, Canadá y Japón.
La toma de control del Congreso por parte de los demócratas introduce una nueva perspectiva a estos datos y puede impulsar el debate entre los legisladores sobre las medidas a adoptar para contener la avalancha china y la fuga de empleos hacia Asia. Los demócratas han pedido en reiteradas ocasiones un aumento de los aranceles a los productos chinos para evitar la entrada masiva. Uno de los más activos en este sentido es el senador demócrata por Nueva York, Charles Schumer, que cuenta con el respaldo de algunos rivales conservadores.
El secretario del Tesoro, Henry Paulson, opina, sin embargo, que la clave de la reducción del déficit comercial está en que las otras grandes economías del mundo, como Europa, Japón y la propia China, crezcan con más vigor y demanden más productos estadounidenses. Aunque a la vez apuesta por mantener la presión sobre Pekín, para que su divisa, el yuan, fluctúe libremente.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.