CiU se mantiene en Lleida e ICV se estrena con un diputado

Convergència i Unió (CiU) continuará siendo la fuerza política hegemónica en el conjunto de la provincia de Lleida. En las elecciones autonómicas celebradas ayer, la candidatura nacionalista encabezada por el ex consejero de Agricultura, Josep Grau, se impuso claramente en la mayoría de los municipios y también en las 10 capitales de comarca, incluida la capital, donde superó en más de 3.000 votos a la lista socialista, que ha perdido uno de los cuatro escaños que tenía.

Una vez escrutados los votos se confirmaron las previsiones adelantadas por las encuestas durante la campaña electoral sobre la composición del futuro mapa parlamentario de la demarcación. CiU se queda con siete escaños, los mismos que tuvo en la pasada legislatura; el PSC pasa de cuatro a tres diputados; ERC y el PP mantienen los que tenían, tres y uno, respectivamente; e ICV, que en el 2003 se quedó a las puertas de obtener representación, tendrá por primera vez un diputado en la Cámara catalana desde la primera legislatura. En Lleida, las celebraciones más justificadas tuvieron lugar en la sede de ICV. Su candidato y actual teniente de alcalde en el Ayuntamiento, Francesc Pané, expresó su gratitud a todos los electores que han confiado en la forma de hacer política de la coalición ecosocialista en los últimos tiempos. La jornada electoral destacó por la baja participación, cinco puntos menos que hace tres años.

Al igual que ha pasado con la circunscripción, el número de votos y el porcentaje de las formaciones ha sido parecido al de 2003. En Lleida capital, CiU se mantuvo en el 33%, el PSC bajó dos puntos, los mismos que ganó ICV. En Balaguer, todos bajaron, a excepción de ICV. En la Seu d'Urgell, en cambio, CiU subió un punto -del 36,8% al 37,4%- y ERC fue la formación que más bajó: del 21,4% al 15,7%.