La nueva hipoteca 'recargable' permitirá refinanciar deudas con un coste hasta cuatro veces menor

Las hipotecas se recargarán como los teléfonos móviles. El ciudadano que tenga contratado un préstamo para financiar la compra de su vivienda y necesite dinero podrá ampliar la cuantía pendiente de amortizar sin necesidad, como hasta ahora, de constituir una nueva hipoteca.

El único límite será el capital inicial de la hipoteca, es decir, si ésta se contrató por 250.000 euros y se han devuelto 100.000 euros, el titular podrá pedir que se le vuelvan a prestar como mucho 100.000 euros. Los expertos calculan que esta novedad, incluida en la futura ley de reforma hipotecaria, permitirá que los costes de esta operación se reduzcan hasta cuatro veces.

La medida, que se prevé que entre en vigor en 2007, facilitará que los hogares españoles, cuyo nivel de endeudamiento se encuentra en máximos por el auge de la vivienda, consigan dinero prestado a intereses más bajos que si solicitaran un crédito al consumo.

Por ejemplo, una familia que ya haya devuelto al banco una parte de su hipoteca y necesite comprar un coche, reformar su piso o tiene cualquier imprevisto podrá pedir a la entidad que le devuelva parte de lo devuelto para hacer frente a los nuevos gastos. La nueva financiación de la llamada hipoteca recargable, que ya funciona en otros países como Francia, se considerará parte del mismo préstamo.

Ahora, para ampliar el capital de la hipoteca es necesario cancelar la actual y constituir una segunda hipoteca, con los cuantiosos gastos de comisiones bancarias, costes notariales, registrales, fiscales y de tasación que ello conlleva. Pero a partir del próximo año esta operación se equiparará al procedimiento que ya se sigue para cambiar una hipoteca de tipo fijo a tipo variable (y viceversa) y ampliar el plan de amortización del préstamo.

Las familias españolas son de las más endeudadas de Europa y su nivel de deudas hipotecarias ha crecido un 40% en los últimos dos años y medio, según la estadística del Colegio de Registradores. La reforma hipotecaria está siendo uno de los ejes de debate del Tercer Congreso de Registradores que hoy se clausura en Granada. Otro de los nuevos productos que se van a regular es la llamada hipoteca inversa, que permite a los mayores de 65 años hipotecar su casa a cambio de percibir una renta que complemente su pensión.

Los registradores han pedido que se den más garantías al dueño del piso en esta ley, que consideran que da a entender que los titulares de una hipoteca inversa deberían recibir autorización del banco para poder vender su casa sin cancelar la hipoteca. Los registradores consideran que impedir que la propiedad hipotecada se venda va en contra de los derechos del titular del piso.