El Salón de Anticuarios de Barcelona exhibe más de 10.000 obras

Hasta el próximo domingo las Reials Drassanes de Barcelona acogen la 15ª edición del Salón de Anticuarios, que reúne a 32 galerías y más de 10.000 obras, desde pinturas, grabados y esculturas hasta muebles, tapices y arte africano. El salón, que inaugura la temporada ferial española, se centra en obras con más de cien años de antigüedad, si bien se admiten piezas art nouveau y art déco, y pinturas de reconocidos artistas del siglo XX, como Plensa, Guinovart, Hernández Pijoan y Tàpies, que exhibe la galería Francesc Llopis.

Son dos pinturas las piezas estrella del Salón de Anticuarios: La font del gat (300.000 euros), de Santiago Rusiñol, en la galería Bernat de Barcelona, y Claustro del monasterio de Sant Benet de Bages (200.000 euros), de Ramon Casas, en Víctor i Fills Antiquaris, que además expone una espectacular colección de vidrios art déco (de 1.000 a 50.000 euros). La creatividad modernista en el campo del mobiliario se refleja en el puesto de Joan i Joana Antiguitats, donde se exhiben un aparador y una mesa de marquetería Mayorel, entre otros.

"Esperamos superar los 16.000 visitantes que tuvimos en el año pasado", señala la presidenta del salón, Raquel Montagut, propietaria de una galería especializada en arte africano que expone, entre otras piezas, un busto en terracota de la civilización Sokoto de Nigeria (12.000 euros). Destaca la presencia de Marc Calzada, presidente de Antiquaris Barcelona, el decano salón de antigüedades y arte moderno que se celebra en la Fira de Barcelona en marzo, con un puesto centrado en el mobiliario y las artes decorativas, donde sobresale una pareja de lámparas de techo francesas en bronce y cristal (21.000 euros) del siglo XIX.

Elisenda Barbié, representante de la última generación de una célebre familia de anticuarios, presenta en el salón obras de arqueología egipcia, griega y romana que incluyen una escultura tardohelenística en mármol, que representa a una mujer sentada (III-II antes de Cristo). La galería Gemma Gimeno Art exhibe obras de pintores españoles de la Escuela de París, y Luis Mora, una selección de pintura catalana. Entre los expositores extranjeros se encuentran la firma alemana Kotobuki, especializada en grabados japoneses, y la galería Aminian de Burdeos (Francia), con una amplia selección de tapices y alfombras del siglo XVII al XIX.

La autenticidad de todas las obras, cuyos precios oscilan entre 300 y 300.000 euros, ha sido certificada por un comité de selección integrado por 15 expertos entre los que figuran Antonia Casanova, conservadora del Museo de Cerámica de Barcelona; Santiago Alcolea, director del Instituto de Arte Hispánico, y Joan Ramón Fillado, profesor de Historia del Arte de la Universidad de Barcelona.

Las puertas del Salón de Anticuarios de Barcelona, que cuenta con el patrocinio de la Agrupació Professional d'Antiquaris de les Reials Drassanes, están abiertas de 11.00 a 21.00 horas y la entrada cuesta seis euros. Entre todas las personas que hayan adquirido obras se sorteará un aguafuerte de 1968 de Antoni Clavé.