Marbella contará con un nuevo PGOU a finales del próximo año

El nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de Marbella, instrumento que debe sentar las bases definitivas para el reestablecimiento de la legalidad urbanística en el municipio, no estará aprobado definitivamente hasta finales del año 2007 y no será hasta entonces cuando la Junta devuelva al Ayuntamiento las competencias en esta materia que asumió el pasado mes de junio.

Los diferentes avatares por los que ha atravesado el Ayuntamiento de Marbella y el desorden interno, especialmente en el área de urbanismo, han resultado serios inconvenientes en el proceso de revisión del PGOU que dirige el urbanista Manuel González Fustegueras. Hasta la disolución de la corporación municipal en abril, encontró poca colaboración del Ayuntamiento para tareas básicas como recopilar la cartografía del término municipal, la información sobre los convenios firmados por los sucesivos gobiernos del Grupo Independiente Liberal (GIL) y la actualización de los usos del suelo. Ahora, los trámites resultan más sencillos en la medida en que la administración que tiene que dar la aprobación definitiva al plan, la Junta, es la misma que lo realiza.

Las previsiones de la oficina de planeamiento de Marbella son aprobar inicialmente el plan en primavera de 2007. Posteriormente se sometería a un período de información pública de dos meses pues, aunque la ley establece un mínimo obligatorio de un mes, la pretensión de los responsables del plan es que sea lo más participativo posible. Para después de verano de 2007 se realizaría la aprobación provisional, por lo que el PGOU quedaría pendiente únicamente de la aprobación definitiva por parte de Obras Públicas, trámite para el que se dispone de un plazo máximo de seis meses pero que en este caso puede ser acortado porque la Junta habrá intervenido y supervisado todos los pasos previos.

En mayo de 2005, el equipo redactor del plan presentó un documento de avance que contemplaba un plan para la normalización de las 30.000 viviendas construidas con licencias irregulares, de las que un 85% podrían legalizarse con medidas para compensar la pérdida de equipamientos públicos. El resto quedaría fuera de ordenación a expensas de la decisión que tomen los tribunales de justicia. El avance recibió 1.600 sugerencias que, según el director de la oficina de planeamiento, José María Ruiz Povedano, en su mayoría no cuestionaban el modelo. Todas han sido contestadas.

La oficina ha iniciado un proceso de consultas con los partidos políticos y otros colectivos sociales para consensuar los contenidos del plan. Además, se mantienen también contactos con otras administraciones para que en el documento que se lleve a aprobación inicial queden ya determinados asuntos como los parques en zonas de protección como las Dunas de Artola y Río Real, la ampliación de las carreteras a Istán, Ojén y Ronda, la plataforma reservada para el transporte público o las seis estaciones que en el término municipal tendrá el tren del litoral.

La Junta mantendrá las competencias urbanísticas en materia de planeamiento de Marbella hasta que se apruebe el nuevo PGOU. El PP ha presentados dos recursos contenciosos administrativos contra la intervención de la Junta ,. si venciera en las elecciones municipales de mayo de 2007, podría desencadenarse un conflicto político porque exigiría la devolución de las competencias en pleno proceso de aprobación del PGOU.