La madre francesa que congeló a dos bebés confiesa otro infanticidio

La madre francesa que reconoció haber ahogado y metido en el congelador de su domicilio en Seúl (Corea del Sur) a dos bebés suyos recién nacidos, ha confesado un tercer infanticidio. Véronique Courjault, de 38 años, admitió ayer que en julio de 1999 ya había matado a un hijo en Francia, antes de instalarse en Seúl con su marido. Explicó a la policía que, tras dar a luz sola en su casa, incineró el cuerpo del bebé en una caldera.

El caso ha visto la luz gracias al marido, que encontró en el congelador de su casa en Seúl el cuerpo de los dos bebés y avisó a la policía. Las pruebas de ADN confirmaron que eran hijos de la pareja. El miércoles la mujer reconoció los hechos y afirmó que actuó sola; que su marido nunca se enteró de lo que había pasado. El matrimonio tiene dos hijos de 10 y 11 años. Aunque las primeras versiones aseguraban que los dos bebés eran mellizos, Courjault aseguró ayer que nacieron en fechas distintas, en 2002 y 2003.