11 muertos en el peor ataque contra un medio de comunicación en Irak

Un grupo de hombres armados asaltó ayer una emisora de televisión por satélite en Bagdad y mató a balazos a 11 empleados, en lo que constituye el peor ataque contra un medio de comunicación en Irak. Según su director, Hassan Kamil, la cadena Shaabiya, propiedad de un pequeño partido laico, no se dedica a la política y su redacción se compone de suníes, chiíes y kurdos. Shaabiya no había iniciado todavía sus emisiones.

Los asaltantes llegaron a las 7.00 (las 6.00 hora peninsular española) con al menos cinco coches todo terreno y atacaron la estación de televisón, ubicada en el barrio de Zayuna, en el este de la capital iraquí, según relató Kamil. Mataron a guardias, miembros de la redacción y personal administrativo. "Algunos llevaban uniformes de policía, otros vestían de paisano. Todos llevaban una máscara", detalló Kamil.

Los medios de comunicación iraquíes, fundados por grupos religiosos o políticos, son un objetivo frecuente de militantes armados, mientras la violencia entre las comunidades religiosas y étnicas sigue asolando el país, donde mueren cada día de forma violenta unas 100 personas.

Kamil precisó que los trabajadores se habían quedado durante la noche en la estación. La mayoría de las víctimas fueron asesinadas cuando dormían en sus camas, y uno estaba en el cuarto de baño. Sólo dos de los empleados presentes sobrevivieron al ataque, aunque uno de ellos resultó gravemente herido. Había sangre en la sala de recepción, en el suelo y en los muebles.

Shaabiya es propiedad del Partido Nacional Justicia y Progreso, que participó en las elecciones legislativas del pasado diciembre, pero no obtuvo ningún escaño. El líder del partido y presidente de la cadena, Abdul Rahim al Nasralá, figura entre los muertos.

"Todo ocurrió muy rápidamente. No habíamos recibido amenazas" explicó Kamil cuando le preguntaron si tenía razones para sospechar que su canal, que sólo había difundido canciones patrióticas a modo de prueba, iba a ser atacado.

190 periodistas muertos

Irak es el lugar más peligroso en el mundo para los medios de comunicación, según las organizaciones profesionales. Reporteros Sin Fronteras afirma que 109 periodistas iraquíes y extranjeros han muerto en el país desde la invasión estadounidense en marzo de 2003. La mayoría de los periodistas asesinados murieron en atentados con bombas o en tiroteos. Ataques como el de ayer, contra la sede de un medio de comunicación, son poco frecuentes. La peor agresión contra una empresa informativa la había sufrido hasta ahora la televisión Al Arabiya, objeto de un atentado con coche bomba perpetrado en Bagdad en 2004.

A pesar de las importantes medidas tomadas por el Gobierno iraquí y las tropas estadounidenses, los tiroteos y los actos de violencia siguen siendo incidentes cotidianos en las calles de la capital. La policía iraquí declaró ayer haber hallado 40 cadáveres en las últimas 24 horas en distintas zonas de Bagdad, con lo que asciende a 150 el número de cuerpos encontrados desde el lunes. Según fuentes del Ministerio del Interior iraquí, las víctimas, como suele ser habitual, tenían señales de haber sido torturadas, estaban maniatadas y presentaban impactos de bala en la cabeza.

Además, al menos cinco personas murieron y otras diez resultaron heridas, cuatro de ellas policías, en un doble atentado cometido contra una patrulla en el centro de Bagdad. Según relató el oficial de policía Ali Hadi, un artefacto estalló al paso de una patrulla de las fuerzas de seguridad cuando circulaba por la calle que une la plaza Teherán con la de Al Jalani, en el centro de la capital.

El oficial comentó que en el momento de la detonación había una abundante circulación. Minutos después, cuando varias unidades de policía habían llegado al lugar de los hechos, explotó un coche bomba que estaba aparcado en las proximidades.