Muere a los 86 años el cineasta italiano Gillo Pontecorvo

El cineasta italiano Gillo Pontecorvo murió ayer en Roma a los 86 años. Su mayor éxito fue La batalla de Argel, película con la que obtuvo el León de Venecia en 1966 y fue nominado al Oscar a la mejor dirección. El filme relata la lucha del Frente de Liberación Argelino contra el ejército francés. Pontecorvo pudo rodar en los lugares donde se desarrolló la guerra de independencia, especialmente en la kasbah de Argel, y no escatimó referencias a la tortura practicada por militares franceses.

Otros títulos importantes en su filmografía son Queimada (1971), con Marlon Brando, y Operación Ogro (1979), que narra el atentado en el que ETA acabó con el vicepresidente del Gobierno de Franco, Luis Carrero Blanco.

Hijo de un rico industrial judío, Gillo estudió química y después trabajó como periodista. En 1941 se afilió al Partido Comunista. Tras la II Guerra Mundial, cautivado por Paisà, de Rossellini, decide dedicarse al cine. Fue asistente de Yves Allegret, Mario Monicelli y otros directores. En 1953 filmó sus primeros cortos documentales y en 1959 rodó Kapò, candidata al Oscar a la mejor película de habla no inglesa.