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Cataluña en precampaña

Todos los partidos piden sanciones para el dirigente del PP que agredió a un manifestante

Piqué rechaza destituir a García Albiol porque actuó "en respuesta a una agresión"

Todos los partidos catalanes exigieron ayer al Partido Popular que tome las medidas oportunas contra su secretario de organización, Xavier García Albiol, quien el pasado martes agredió a un manifestante durante el altercado que se produjo a las puertas del local de Martorell donde los populares celebraban un mitin. Pero Albiol, que fue grabado por una cámara de Tele 5 mientras golpeaba a un manifestante que blandía una cacerola, no piensa asumir ninguna responsabilidad. Así lo afirmó ayer el líder del PP catalán, Josep Piqué, quien justificó la actuación de su secretario de organización asegurando que ésta se produjo "en respuesta a una agresión".

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Una trayectoria polémica

Piqué justificó la reacción agresiva del responsable de organización de su partido alegando que "humanamente es comprensible" aunque no es la adecuada y pidió en nombre de García Albiol a todos los militantes del partido que "no caigan en provocaciones" y que mantengan la "actitud cívica que siempre han venido manteniendo". "Es el colmo, el colmo, que los agredidos, los que siempre recibimos los golpes, las piedras y las botellas, tengan que dar una explicación porque una persona tenga una reacción humana, perfectamente comprensible", insistió Piqué.

Con estas palabras, descartó que su partido imite al PSC, que el pasado miércoles expulsó al primer secretario de la Joventut Socialista de Catalunya (JSC) en Martorell, Jordi López, por haber participado en la manifestación contra el acto del PP en el que fueron agredidos tanto Piqué como el secretario general del partido, Ángel Acebes. El presidente del PP, Mariano Rajoy, también se refirió ayer a la polémica para aclarar que su partido no pide "solidaridad", sino "la aplicación de la ley". El líder de la oposición se lamentó de no haber recibido ninguna llamada de solidaridad por parte del Gobierno.

"Bombero pirómano"

Todo ello le valió al PP un reguero de críticas en vísperas del inicio de la campaña electoral catalana. El diputado Joan Herrera, de ICV, tildó a Albiol de "bombero pirómano" y pidió su dimisión inmediata. "No puede ser que ayer [por anteayer] viéramos imágenes en las cuales el responsable de organización del PP agredía a una persona simplemente porque tocaba una cacerola", dijo Herrera.

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En un escueto comunicado, el PSC quiso poner en evidencia las diferencias entre Josep Piqué y el candidato socialista José Montilla, quien ordenó la expulsión del militante de su partido que participó en los altercados. "La diferencia entre José Montilla y el resto de los candidatos queda perfectamente reflejada en nuestro lema Hechos, no palabras", rezaba el comunicado del PSC. La actitud de Montilla fue avalada ayer por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, quien, tras el acto de conmemoración del 12 de octubre en Madrid, destacó su "contundencia".

El líder de CiU, Artur Mas, afirmó que, al igual que le pareció "correcta" la decisión del PSC de expulsar al líder de las juventudes socialistas en Martorell, también sería conveniente que el PP catalán "exigiese responsabilidades" a García Albiol.

En declaraciones a Radio Barcelona, la portavoz de Esquerra Republicana, Marina Llansana, pidió al PP "una reacción clara y contundente como se la exigimos en su día al PSC". Llansana también exigió a todas las formaciones políticas, en especial a sus dirigentes, que depuren responsabilidades ante cualquier acto violento.

En plena polémica, la delegación del Gobierno en Cataluña salió ayer al paso de las críticas de Josep Piqué por la según él "tardía" intervención de la Guardia Civil durante los incidentes del martes. Fuentes de este organismo aseguraron que 10 agentes de la Guardia Civil se encontraban sobre el terreno desde antes del comienzo del mitin y que otros 30 llegaron al subir la tensión entre manifestantes y asistentes al mitin.

El altercado de Martorell comenzó justo antes del inicio del acto político, cuando uno de los asistentes al mitin trató de arrancar a un manifestante una pancarta contra el partido de Mariano Rajoy. Los abucheos y empujones comenzaron de inmediato y en medio del desbarajuste llegaron Josep Piqué y Angel Acebes, que entraron al recinto siendo increpados por los manifestantes.

El secretario general del PP afirmó que espera que este tipo de altercados no se vuelvan a repetir y que, a partir de lo ocurrido, el Gobierno central y el autónomo refuercen los despliegues de seguridad para evitarlos. Acebes se mostró convencido de que el mitin de Rajoy en L'Hospitalet, programado para el domingo, se celebrará con normalidad.

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