"Estamos haciendo lo que podemos"
Tras la cena del 5 de mayo de 2005 del magistrado José Antonio Martín con Wilebaldo Yanes (padrino y empleador del hijo de Martín) y Julio Bornia (hermano del preso), la policía grabó significativas conversaciones del trío.
El 6 de junio de 2005, Martín dice que sus "impresiones no son buenas" para que Rafael Bornia consiga la libertad condicional. De hecho, al día siguiente, su sección desbarata una apelación de Rafael. Después, Martín pregunta por unos papeles enviados por Yanes. Éste los identifica en clave: "Son de lo mismo, del tío". Yanes y Julio Bornia han confesado que entregaron a Martín "toda la documentación pertinente para que se viera que no era justa la situación por la que estaba pasando". Hubo tres entregas.
El 10 de junio, la suegra del magistrado está enferma. Esto complica pero no frena sus gestiones. "Tranquilo", dice Yanes, "él está en eso, puedes estar seguro", aclara Yanes a Julio Bornia. Yanes añade que el magistrado le ha garantizado que está "estudiando" los papeles recibidos.
El 14 de junio, Yanes da malas noticias a Julio Bornia: "La cosa está muy jodida". Pero le brinda este mensaje del magistrado: "Estamos haciendo todo lo que podemos, pero que no hay predisposición por los demás. No hay mucha predisposición". Y sugiere que "es fundamental" una conversación directa de Julio con el magistrado. El 27 de julio, la víspera de la vista sobre la petición de libertad condicional de Rafael Bornia se produce la siguiente conversación:
José Antonio Martín. Mañana es la vista de eso.
Wilebaldo Yanes. Sí, joder, mira a ver qué puedes hacer ahí.
J. A. M. Dile que no se enrolle, que diga las cosas claritas y sencillas.
W. Y. Confianza y seguridad, con eso va a ir.
J. A. M. No, que explique la procedencia del dinero, que lo explique clarito y sencillo.
W. Y. Pero si está prestado ante notario y todo joder.
J. A. M. Bueno, pero que lo explique, que lo explique de palabra que para eso es la vista, pero de forma sencilla, sin rollos, y que diga que está dispuesto a prestar una fianza, la cantidad que se le diga, ¿comprendes?
Esa noche, vuelven a hablar:
W. Y. ¿Está eso en la Sala tuya o no? El tema ése.
J. A. M. Mañana tenemos un señalamiento de eso.
W. Y. Me parece que están otras personas, no tú.
J. A. M. No sé porque somos cuatro, y no sé si me toca. Pero sé que mañana tenemos señalado algo, en una vista a las diez.
W. Y. A las diez, ¿te han avisado a ti?
J. A. M. Hombre, claro, la convoqué yo.
W. Y. La fijaste tú, pero yo no sé qué pasa.
J. A. M. Es una petición de libertad, y habrá que estudiarlo mañana.
El 29 de julio. La conversación se produce después de que fuera denegada la petición de libertad condicional.
Abogado de Rafael Bornia. Ya le habían llamado a Mercedes [procuradora] para notificarlo, es decir, ayer en la vista ya estaba hecho.
Julio Bornia. Efectivamente.
Abogado. Y palabras, palabras, palabras. Yo hago, yo hago. Yo podía pedir hasta la nulidad en el Constitucional y si hay que dejar a ese señor mal, le voy a dejar.
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