Detenidos dos agentes de la Guardia Urbana por trato de favor a empresas

Dos responsables del departamento de obras de la Guardia Urbana de Barcelona fueron detenidos el pasado jueves por presunto trato de favor a empresas de familiares. Lo confirmó ayer el concejal de Seguridad del Ayuntamiento de Barcelona, Ferran Julián, quien añadió que los dos agentes están suspendidos cautelarmente de empleo y sueldo, a la espera de lo que dictamine el juez. La Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña investiga ahora las presuntas irregularidades.

Los dos agentes municipales, supuestamente, inducían a empresas constructoras a contratar elementos de señalización con una firma de la que son propietarios familiares y personas directamente relacionadas con ellos mismos, según una nota que ayer difundió el consistorio, poco después de que se hicieran públicos los hechos. "Los agentes tenían relación con las concejalías de distrito y con los diferentes actores que intervienen en las obras que se hacen en la vía pública", señaló el concejal de Seguridad.

La empresa favorecida estaba relacionada con ambos agentes, por lo que su grado de implicación es similar. Aun así, uno de los dos arrestados era el jefe del departamento de obras y el otro "un agente sin más", según Julián. El concejal aseguró ayer que desconocía los nombres y apellidos de los dos policías, y adujo que no se hacían públicas ni siquiera sus iniciales, contrariamente a lo que es habitual tras una detención, porque fue el Cuerpo Nacional de Policía el que practicó las detenciones y no la Guardia Urbana.

Las sospechas se iniciaron el pasado día 7 de febrero, cuando el ahora alcalde de Barcelona, el socialista Jordi Hereu, era aún responsable del área de Seguridad en el consistorio. Una denuncia anónima -un "comentario de alguien", en palabras de Julián- alertó a la Guardia Urbana de supuestas actividades ilícitas.

CiU pide explicaciones

La Unidad de Asuntos Internos de la Guardia Urbana puso en marcha entonces una investigación para aclarar lo sucedido. "En cuanto tuvimos indicios de esas actividades, pusimos el caso en manos de la fiscalía", explicó el concejal. El Ayuntamiento de Barcelona comunicó los hechos a la fiscalía el pasado 5 de mayo. Julián insistió en que se trata de "un caso aislado" y defendió la actuación "rápida y contundente" de la Guardia Urbana.

El grupo municipal de Convergència i Unió (CiU) destapó ayer por la tarde la noticia de las dos detenciones, que después fue confirmada por el concejal de Seguridad. En un comunicado, la federación nacionalista reclamó al gobierno municipal "información puntual inmediata a la ciudadanía y a los grupos políticos". Y advirtió de que, si no se facilita dicha información, la solicitará en la reunión de la Comisión de Seguridad y Movilidad que se celebrará el próximo jueves. Según Julián, ya estaba previsto que la comisión tratara del asunto ese día .

"La transparencia y la información han de ser la guía principal del gobierno, para dar un mensaje de tranquilidad y confianza a los ciudadanos", explicó el concejal de CiU Joaquim Forn.