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Zapatero exige al PP que distinga "entre guerra y paz" y apoye la misión en Líbano

El presidente anuncia en Rodiezmo que las pensiones mínimas subirán el doble de la media

Carlos E. Cué

El presidente del Gobierno se tragó sus ganas de ver la final del Mundial de baloncesto y acudió a la fiesta minera de Rodiezmo (León) para prometer, como el año pasado, que las pensiones mínimas, que cobran tres millones de personas, subirán el doble que las demás. Eso supondrá un 6% de crecimiento, entre 8 y 40 euros al mes. Además, José Luis Rodríguez Zapatero retó al PP a apoyar el jueves el envío de tropas a Líbano. "Estoy orgulloso de decir no a la guerra de Irak y a la paz en el Líbano. El PP no sabe distinguir entre guerra y paz", sentenció ante las dudas de la oposición sobre esta operación.

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El partido de baloncesto que convirtió a España en campeona del mundo no pudo con Rodiezmo. Mientras millones de españoles disfrutaban ante la pantalla, Zapatero escuchaba el larguísimo discurso de José Ángel Fernández Villa, el histórico líder minero asturiano, que tras 28 años ininterrumpidos subiendo al mismo escenario, en las campas entre Asturias y León, admitía su dificultad para decir algo distinto a lo de años anteriores. La asistencia era la habitual: 35.000, según los organizadores. "Parece que venimos siempre los mismos, porque siempre dais los mismos datos de participación", se rió Zapatero.

El presidente se siente cómodo en Rodiezmo. Y eso que ni su atuendo, más endomingado que el de sus compañeros de escenario, ni el hecho de que sea el único que no se pone pañoleta roja ni canta con pasión La Internacional al final con el puño en alto -sólo la tararea a ratos, con timidez- le permiten confundirse en el ambiente netamente sindicalista del encuentro. Pero el líder del PSOE va allí a hacer balance de sus logros sociales, y eso le entusiasma.

El presidente se jactó de sus pactos por el empleo estable y de los 3.000 empleos diarios creados desde que gobierna y aseguró que va a destinar 400 millones para la puesta en marcha de la Ley de Dependencia. Y luego dio los datos de pensiones y anunció la subida de las mínimas el doble que las demás. El año pasado y el anterior crecieron el doble que las otras (más del 6%), por lo que al final de la legislatura habrán aumentado, según el presidente, un 25%.

Subida para tres millones

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Se trata de prestaciones que cobran tres millones de españoles y que van desde los 132 euros al mes de una pensión por orfandad hasta los 658 por gran invalidez. Por lo tanto, una subida del 6% supondría entre 8 y 40 euros al mes. Las pensiones de este tipo con cónyuge a cargo ya han crecido un 26% en tres años, según La Moncloa.

La gente le pedía caña al PP y el presidente no defraudó. Ante las dudas sembradas por la oposición sobre la operación en Líbano, recuperó de inmediato su oposición a la guerra de Irak, uno de los asuntos más recurrentes en sus mítines. "Con el Líbano no saben si decir que o que no, porque la derecha no distingue entre la guerra y la paz. Cuando fue lo Irak decían que iban a una misión humanitaria, pero fueron a una guerra ilegal. Ahora que Naciones Unidas, que nunca declara guerras, pide a España, voz de la paz en el mundo, que estemos en Líbano para hacer la paz, lo vamos a hacer con plena convicción. Me siento orgulloso de haber dicho no a la guerra de Irak y a la paz en el Líbano. De hecho, la derecha no distingue tampoco lo que es perder y ganar unas elecciones. Las cosas en la vida se aprenden viviéndolas, así que me propongo que tengan unas cuantas derrotas a ver si aprenden lo que es ganar y perder".

El presidente recordó que el jueves se votará en el Congreso la decisión de enviar tropas a Líbano, porque así lo exige la Ley de Defensa Nacional promovida por su Gobierno, y retó al PP a aprobar esa misión. "Sólo habrá envío de tropas si el Parlamento dice que sí, como comprometimos. Hemos cambiado la ley para que las misiones no sean ni por capricho ni por error de ningún Gobierno ni de ningún presidente", dijo en clara referencia a José María Aznar.

Mientas, el partido de baloncesto seguía. De hecho fue el propio Zapatero quien anunció el resultado al público. "Han competido con deportividad y han demostrado ser un equipo, así es como se gana", sentenció con un tono extrañamente frío para un amante del baloncesto. Pero a la gente no le importó mucho, ellos habían venido a escuchar un mitin.

El presidente del Gobierno, durante el mitin de ayer en Rodiezmo.
El presidente del Gobierno, durante el mitin de ayer en Rodiezmo.REUTERS

Reproches de algunos teloneros

El encuentro minero de Rodiezmo no es un mitin socialista al uso. De hecho, es el único en el que Zapatero, líder indiscutido del socialismo español, se ve obligado a escuchar reproches, a veces muy directos, de sus teloneros, que en este encuentro llegaron hasta nueve.

El espíritu reivindicativo de los líderes mineros impide que sea, como los demás, un acto pensado para la gloria del presidente. Este año las críticas fueron menores, porque los dirigentes sindicales están satisfechos con el plan del carbón que Zapatero prometió el año pasado y se aprobó poco después. Aunque los líderes mineros Manuel López García y José Ángel Fernández Villa se quejaron de que el Gobierno no les "entiende" cuando piden más infraestructuras.

El mitin es además único, por su carácter interactivo. Los mineros, la mayoría jubilados, y especialmente sus mujeres, opinan en voz alta sobre casi todo lo que dicen los oradores. Cuando Zapatero hablaba de los inmigrantes, y explicaba que hay que acogerlos y apoyar a África, unas mujeres discutían: "Eso, eso", decía una. "Ya, pero es que ya son muchos", respondía la otra. Zapatero insistía con su discurso de apoyo a los extranjeros. "A ver si te escucha mi marido, que tengo un racista en casa", sentenciaba otra mujer.

No faltaron tampoco las quejas a Zapatero de un grupo de habitantes de Rodiezmo, un valle que se ha quedado sin agua porque las obras del AVE a Oviedo-Gijón han cerrado el acuífero.

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