Ascienden a 40 los presuntos incendiarios detenidos en Galicia
El goteo de detenciones de supuestos autores de incendios forestales no se interrumpe en Galicia, donde la Guardia Civil arrestó ayer a otras dos personas, una de ellas un portugués. Desde principios de agosto, cuando se desató la oleada de fuegos que ha devastado casi 80.000 hectáreas, han sido arrestados 40 presuntos incendiarios, de los que 15 ingresaron en prisión. Las fuerzas de seguridad no han podido establecer por ahora ninguna conexión entre los supuestos pirómanos.
Las dos últimas detenciones se produjeron ayer en el mismo municipio de la provincia de Ourense. La Guardia Civil arrestó sobre las 10.30 a un ciudadano portugués, J. M. N. R., de 23 años, residente en la localidad de A Peroxa, al que le imputa haber provocado un incendio el día 8 y otros dos fuegos que no pasaron de conatos, cuatro días después, en Amoeiro, otro ayuntamiento de la zona. Otro vecino de A Peroxa, E. V. F., de 29 años, fue detenido a las 13.30 acusado de dos incendios que el día 12 calcinaron un bosque de pinos y algunas casas abandonadas en el municipio de Coles.
Fuentes próximas a la investigación admitieron que no hay ningún dato que conecte a los 40 detenidos hasta ahora, entre los que hay desde tres integrantes de cuadrillas de extinción hasta varios alcohólicos y personas en tratamiento psiquiátrico.
Situación tranquila
Pese al aumento de las temperaturas, con 30 grados en Ourense, Pontevedra y el sur de A Coruña, la situación sigue tranquila. A última hora de la tarde, la Xunta sólo tenía registrado un pequeño incendio en Mazaricos (A Coruña).
Tanto el Ejecutivo gallego como el central ultiman los decretos de ayudas a los afectados que se aprobarán esta semana. Mientras, el PP insiste en su ofensiva para culpar a la Xunta de las consecuencias de los incendios. El grupo popular en el Parlamento de Galicia anunció ayer que exigirá "responsabilidades políticas" a la consejera de Sanidad, la socialista María José Rubio.
Por otra parte, las autoridades portuguesas han detenido durante 2006 a 30 personas acusadas de provocar incendios, según los datos de la Policía Judicial conocidos ayer, informa Miguel Mora. En los primeros 15 días de agosto de 2006 Portugal ha perdido 36.290 hectáreas de bosque, y casi 50.000 en lo que va de año.
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