Discos duros para grabar cien horas de televisión
Se puede encontrar en cualquier tienda un disco duro externo, de 250 o 300 gigabytes (GB) de capacidad, por poco más de 100 euros. Se trata de una capacidad muy elevada, equivalente a más de 60 discos DVD o más de 100 horas de programación televisiva grabadas con máxima calidad. El bajo precio de los discos duros explica que en los últimos meses hayan aparecido diversos aparatos que, en el fondo, se basan en una sola idea: dotar al televisor de disco duro y para poder grabar cualquier programa, sin necesidad de manejar cintas de vídeo, CD o DVD.
Por eso, es frecuente ver en los comercios sintonizadores de TDT con disco duro, grabadoras de DVD de mesa con disco duro, ordenadores preparados para ser conectados al televisor e incluso televisores que ya tienen el disco duro integrado. Además, ya existen discos duros que pueden ser conectados a un televisor -y que pueden reproducir los contenidos multimedia que tienen grabados- y hay adaptadores para enviar, con o sin cables de por medio, el material audiovisual guardado en el ordenador al televisor. Se trata de una amplia variedad de dispositivos.
Mientras que los vídeos tradicionales graban un programa en una cinta -que se puede ver cuando se quiera-, los grabadores de disco duro peermiten grabar el programa y verlo mientras tanto. Así, es posible, ver el programa con un decalaje de, por ejemplo, 15 minutos. Se puede, además, pasar rápido la parte que se quiera -como los anuncios- o repetir una escena, mientras se sigue grabando lo que se emite.
Con este procedimiento, no es extraño ver un programa grabado 15 minutos después de su inicio y acabar de verlo al mismo tiempo que se emite su final en directo. Los aparatos de grabación con disco duro empiezan también a incluir una guía de programación que simplifica su uso. En vez de programar el canal y la hora de inicio y final de grabación, la guía permite seleccionar lo que se quiere grabar y el propio aparato busca el programa y su hora de emisión. Así, se puede seleccionar con mayor comodidad y menos riesgo de error los contenidos que se quieren grabar.
La idea no es nueva, tiene más de cinco años. La diferencia respecto de las grabadoras de DVD de sobremesa es que el disco duro tienen gran capacidad, precio más asequible -a partir de 300 euros incluyen lector y grabador de DVD- y guía de programación.
Este otoño, muchos de los nuevos modelos incluirán tanto el sintonizador analógico clásico, como el digital y el nuevo sistema de conexión digital HDMI, que evita pérdidas de transmisión. Todo ello puede hacer que las ventas finalmente despeguen, como no lo han hecho hasta ahora.
