Euskadi registra diez denuncias cada día por malos tratos contra las mujeres

Los juzgados vascos encargados en exclusiva o con otras tareas de combatir la violencia conyugal han recibido 3.761 denuncias por malos tratos a mujeres durante su primer año de funcionamiento, lo que supone una media diaria de diez acusaciones. En este tiempo han registrado 1.322 solicitudes de órdenes de protección, de las que han concedido el 77%. En la mayoría de los casos, los jueces imponen al agresor el alejamiento de su víctima. Las injurias, las lesiones y los delitos contra la libertad han sido los actos más denunciados, según los datos de Justicia.

La Ley Integral contra la Violencia de Género, que incluye medidas penales, judiciales, educativas y laborales, entró en vigor en enero de 2005, pero sólo a medias, ya que la parte penal y judicial empezó a rodar unos meses después, a finales de junio. En Euskadi se crearon para entonces tres juzgados dedicados en exclusiva a la violencia conyugal, uno en cada capital. En el resto de los partidos judiciales, un juzgado de Instrucción asumió, junto al resto de procedimientos, las causas de malos tratos a mujeres.

Ha transcurrido un año y la consejería de Justicia hace balance del funcionamiento de estos medios, a los que el próximo mes de diciembre se sumará un segundo juzgado específico en la capital vizcaína. Los tres juzgados especializados y los 11 mixtos restantes han recibido durante este plazo un total de 3.761 denuncias por malos tratos contra mujeres, lo que supone una media de diez denuncias diarias. Han registrado además 326 asuntos civiles, la mayoría divorcios contenciosos.

Los actos más denunciados han sido injurias (62,1%), lesiones (34,2%), delitos contra la libertad (32,4%), vejaciones injustas (20,9%) y delitos contra la integridad moral (8,3%).

El perfil de la víctima por edad y nacionalidad responde a una mujer española y mayor de edad en el 75,4% de los casos. La agredida es extranjera y mayor de edad en el 24,3% de las situaciones. En cuanto a los agresores, el 61,1% de los condenados son españoles y el 24,9% restante, extranjeros. Casi el 14% de los hombres enjuiciados durante este último año han sido absueltos, según las cifras del Departamento de Justicia, que recuerda que los casos de violencia que puedan darse de una mujer contra un hombre no se tramitan en los juzgados especializados.

A la vista de estos datos, la violencia sobre las mujeres es más frecuente en el marco de una pareja que mantiene una relación. En el 37,6% de los casos denunciados, el agresor y la víctima eran cónyuges; en un 24,2% tenían una relación afectiva, en un 22,5% habían mantenido una relación y en un 14% eran ex cónyuges.

Desde que se pusieron en marcha las medidas judiciales y penales de la Ley Integral, los juzgados vascos han contabilizado 1.322 solicitudes de órdenes de protección, casi cuatro cada día. En la mayoría de casos (un 97,9%) es la propia mujer víctima de maltrato la que hace la petición, seguida de la Fiscalía (2%) y otras personas ligadas a la afectada (0,1%).

Los jueces han concedido el 77% de las solicitudes y han denegado el resto. Una vez otorgada la orden, y en función de la gravedad que atribuyan a los hechos, pueden imponer medidas penales o civiles al agresor. El alejamiento (32,4%) y la prohibición de comunicarse con la víctima (31,1%) son las medidas penales más frecuentes. En un 5% de los casos deciden encarcelar al acusado.

La portavoz de la asociación Clara Campoamor, Blanca Estrella, no duda en afirmar que la justicia "abandona" a aquellas mujeres a las que no concede la orden de protección. Y en el caso de las víctimas a las que sí se la otorga, considera que las medidas con las que la acompaña son "muy flojas".

Mientras, la Ertzaintza detuvo la noche del pasado lunes en San Sebastián a un joven de 19 años por propinar un puñetazo en la mandíbula a su pareja, quine se encuentra embarazada de dos meses. Horas antes, había arrestado a un varón de 41 años en Tolosa por agredir a una mujer y a dos hombres que salieron en su defensa. La Policía Municipal de Bilbao detuvo ese día a un tercer hombre, de 43 años, por increpar a su ex pareja y agredir a un agente que intentó apaciguarle.