El PSOE limita a siete años que la inversión estatal se ajuste al peso de la población

El grupo socialista presentará en el Congreso de los Diputados una enmienda a la disposición adicional tercera de la proposición de reforma del Estatuto andaluz para limitar a "siete u ocho años" el que la inversión del Estado en Andalucía "sea al menos equivalente al peso de la población andaluza" sobre el conjunto de España. El encargado de realizar este anuncio fue el presidente de la Junta, Manuel Chaves, quien reconoció las "contradicciones" que, en materia de inversión, plantean los nuevos Estatutos autonómicos.

Chaves participó en los cursos de verano de San Lorenzo del Escorial (Madrid), donde pronunció la conferencia Estado y poder territorial en España. Curiosamente, fue él el que anunció una de las enmiendas de mayor calado que presentará el grupo socialista del Congreso el próximo 5 de septiembre al texto de reforma.

La enmienda en cuestión limita a "siete u ocho años" la vigencia de la disposición tercera del texto del nuevo Estatuto, en la que se insta al Estado a que "la inversión destinada a Andalucía sea al menos equivalente al peso de la población andaluza sobre el conjunto del Estado", alrededor del 18%. Chaves dijo que "está dispuesto a aceptar" esta modificación.

Fuentes socialistas indicaron ayer que esa propuesta se incluyó sin ninguna acotación temporal "un poco adrede", después de que en el proyecto del Estatuto catalán figure una similar pero en relación con su peso en el PIB nacional. El Congreso limitó a siete años esa inversión. Estas fuentes indicaron que en los trabajos de la ponencia en el Parlamento andaluz tanto el PSOE como IU daban por "sobrentendido" que las Cortes corregirían la disposición adicional tercera. La misma convicción tienen con respeto a otra disposición por la que se reclaman cinco competencias exclusivas del Estado mediante el artículo 150.2 de la Constitución.

Chaves reconoció que algunos Estatutos entran "en contradicción" puesto que "algunas comunidades autónomas hacen referencia a que su participación en las inversiones del Estado tiene que ser en relación con su porcentaje de Producto Interior Bruto; nosotros hemos introducido una relación con nuestro porcentaje de población, y otras comunidades establecen otra vía" [las Islas Baleares hacen referencia a la deuda histórica en infraestructuras].

Los tres 'noes'

El presidente andaluz pidió al PP que se sume al "consenso" entorno al Estatuto y aseguró que "todo está abierto" en las negociaciones, salvo tres cuestiones: "No estamos dispuestos a incluir el término nación en el Estatuto, como lo pide el Partido Andalucista. No estamos dispuestos a retirar del preámbulo el término realidad nacional, como nos pide el Partido Popular. Y, en tercer lugar, tampoco estamos dispuestos a rebajar el nivel de autogobierno y de competencias que se han incluido en el proyecto".

Tanto el PP como el PA contestaron ayer que no aceptaban las limitaciones de Chaves. El presidente regional popular, Javier Arenas, declaró que "todos los asuntos tienen que estar abiertos", mientras que el secretario general del PA, Julián Álvarez, advirtió de que "la censura previa" hace "difícil" avanzar hacia el acuerdo, informa Europa Press.

Tras llamar al consenso, Chaves arremetió contra el PP, al que acusó de "contradicción" al "negarse a cualquier acuerdo en relación con el Estatuto de Andalucía cuando sí lo han hecho con los de otras comunidades como Baleares, Valencia o Castilla y León". Explicó la actitud del partido conservador por una voluntad de "hacer ruido", un afán que llega al "ridículo" de profetizar "el fin de España, el fin del mundo, el fin de la familia, el fin del bienestar...".

En otro momento, Chaves aseguró que si el PP no apoya las reformas de Cataluña ni de Andalucía es porque no se considera un partido de gobierno en estas comunidades. "Una posición", dijo, "que quizás indique que el PP de esas comunidades ha tirado la toalla en cuanto a su entrada el Gobierno, en el que parafraseando la célebre frase, podríamos decir que ni está, ni se le espera".

A su juicio, el PP percibe las reformas de Cataluña y de Andalucía "como una agresión y una derrota en toda regla a su estrategia", cuando "debieran ser contempladas como un ejemplo de normalidad democrática, de maduración del Estado de las autonomías y en la lógica política de la consolidación del Estado autonómico".

El líder socialista opinó que "España funciona ya como un Estado federal" y que existen "muy poquitas diferencias" entre el modelo federal alemán y el modelo autonómico español.