Pocos cambios
La Bolsa española salvó los muebles en los minutos finales de la sesión, después de que la mayoría de los inversores optara por limitar sus riesgos.
La falta de empuje del conjunto de los mercados de valores europeos y la altura alcanzada por algunas cotizaciones parecían argumentos suficientes para reservar parte del dinero para la vuelta de las vacaciones, lo que hizo que el Ibex 35 llegara a perder el 0,34% pocos minutos antes del cierre. Los causantes de este cambio de orientación del mercado fueron algunos resultados empresariales, aunque los analistas vuelven a poner el acento en la escasez del dinero para justificar tanto la facilidad con que se recuperaron las cotizaciones como la debilidad que habían mostrado a lo largo de toda la mañana.
El Ibex 35 terminó con un avance del 0,20% y en 11.635,20 puntos, lo que no cambia nada en términos técnicos al considerarse este avance como parte del amplio "movimiento lateral" que viene efectuando el mercado.
El índice de los valores medianos subió el 0,30%, mientras que las sociedades pequeñas perdieron el 0,73% al quedar fuera de los movimientos de los inversores profesionales.
La contratación en el mercado continuo descendió hasta 3.458,97 millones de euros, a pesar de que el banco SCH volvió a aportar 945,14 millones de euros mediante numerosas operaciones "de bloques" consecuencia del lavado de cupón. Las operaciones "abiertas" bajaron en casi 500 millones de euros respecto del día anterior hasta sumar 2.198,97 millones de euros.
Entre los indicadores económicos del día destacó el dato semanal de reservas de crudo y gasolina en Estados Unidos, que mostró un descenso de la gasolina disponible para el verano y provocó un importante repunte en el precio del petróleo. El índice IFO de confianza empresarial en Alemania descendió poco más de un punto en el mes de julio, pero ese ajuste se consideró como algo normal dadas las circunstancias internacionales.