Barberá sólo ha aprobado un centenar de licencias de vivienda protegida desde enero

El Ayuntamiento de Valencia, que preside Rita Barberá, del PP, sólo ha aprobado desde enero licencias para construir 108 viviendas de protección oficial (VPO). El lento goteo de promociones de los últimos años, en los que los permisos al cierre del ejercicio no alcanzan las 600 VPO, aleja al gobierno local de su objetivo de asegurar la puesta en el mercado de 9.000 pisos en este mandato. La oposición socialista denuncia el "fracaso" del PP en promocionar vivienda asequible, mientras el Consistorio argumenta que el suelo para las VPO está reservado y garantizada su construcción.

Entre 2003 y 2005 sólo se han otorgado licencias de ocupación para 1.859 VPO

La edificación de VPO en Valencia sigue bajo mínimos, denuncian los socialistas. Según sus datos, en lo que va de año sólo se han concedido licencias de construcción para 41 pisos, a petición del Instituto Valenciano de Vivienda (IVVSA). De promotores privados al PSPV no le consta ninguna solicitud. Fuentes del equipo de gobierno del PP niegan estas cifras y aseguran que desde enero se ha dado vía libre a la edificación de 108 VPO y han recibido licencia de primera ocupación otras 207.

Más allá de estas discrepancias, las cifras ponen de manifiesto que el gobierno local del PP está muy lejos de cumplir el objetivo que se marcó en el programa electoral de este mandato. La alcaldesa, Rita Barberá, prometió que sacaría al mercado 9.000 VPO y mantuvo ese reto cuando en abril de 2004 anunció que permitiría urbanizar suelo de huerta en el nuevo plan general para "intensificar" su política de vivienda. Pocos meses después firmó un convenio con el entonces consejero de Territorio, Rafael Blasco, que incluso elevó la cuenta a 13.000 VPO, de las que 7.800 estarían finalizadas en 2007.

Sin embargo, la evolución de las licencias en los últimos años subraya el escaso peso de la VPO en Valencia y marca una gran distancia con estas previsiones. Las casas de protección pública sólo alcanzan el 8,7% del total de licencias entre 2000 y 2005, según el grupo municipal socialista. En esos años, el Ayuntamiento concedió permiso para 25.553 viviendas; de ellas únicamente 2.229 protegidas. El año 2004 marcó el récord negativo: el Consistorio sólo visó 90 pisos protegidos.

En el mandato actual, concretamente, el equipo del PP contabiliza 1.264 VPO entre 2003 y 2005. Pero por la Comisión de Urbanismo pasaron licencias de obra para un total de más de 11.000 casas. La estadística de licencias de primera ocupación, con las casas ya terminadas, refleja asimismo la baja implantación de la VPO en el mercado, a pesar de que en los últimos años el módulo para calcular su precio ha subido en dos ocasiones y los pisos cuestan ya por encima de los 170.000 euros (con garaje). En 2003 se concedieron 785 visados de primera ocupación, mientras que al año siguiente descendieron a 554. El pasado ejercicio concluyó con 520 permisos para ocupar casas protegidas, y desde enero se acumulan 207. A este ritmo, de 1.264 licencias de obra y 1.859 de ocupación en tres ejercicios (2003-2005), el Ayuntamiento tardaría casi tres lustros en entregar las llaves de las 9.000 prometidas.

El PP, sin embargo, insiste en que los proyectos en ejecución o previstos en suelo urbano y en los sectores urbanizables permitirán poner a disposición de los valencianos miles de VPO y argumentan que experimentarán en los próximos años un considerable empujón. Prueba de ello serían un centenar de casas que terminará este año la empresa pública Aumsa, que pedirá permiso para edificar otra cantidad similar. Los promotores privados o el IVVSA, que pretende adelantar la urbanización de Sociópolis, solicitarán otras 310 licencias de obra. Todas estas autorizaciones, de momento, siguen sin elevar significativamente la media de los últimos años.

El concejal de Urbanismo, Jorge Bellver, redimensionó la apuesta del equipo de gobierno el pasado mayo con una campaña divulgativa en torno a la construcción de 4.611 VPO en "los próximos años", sin concreción de fechas. La lista de actuaciones incluye sectores urbanizables en marcha y a punto de despegar, pero también otros, como Patraix (1.250 VPO) o Malilla Sur (290) que aún no han superado el trámite de reparcelación previo al inicio de cualquier obra. Teniendo en cuenta que un inmueble tarda unos 18 meses en edificarse, estas viviendas no estarán disponibles antes de dos años.

"Lo importante es que está claro que las viviendas se van a hacer, y esa es la mejor seguridad", destacan fuentes del equipo de gobierno, que insisten en que "están aprobadas y el suelo reservado, y eso es garantía de que saldrán adelante". El PP confía también en un incremento patente de la VPO con la ejecución del proyecto de Sociópolis, en la pedanía de La Torre, con 2.808 casas, y otras promociones en suelo urbano, como es el caso de las 846 en el entorno del Parque Central.