El PSE descarta una ruptura con el PP tras consultar a los alcaldes

El secretario general del PSE-EE, Patxi López, cerró ayer la posibilidad que él mismo había abierto de romper relaciones con el PP en los ayuntamientos en los que gobiernan juntos. Los socialistas vascos renuncian a consumar esa ruptura para "no contribuir a enturbiar la política como pretende el PP". López sondeó a los regidores de su partido que mantienen pactos de gobierno con los populares para sopesar una posible ruptura. Al final, la ha descartado.

Después de haber elevado al máximo el pasado fin de semana el nivel de respuesta ante la "indecencia política" de los populares, el PSE ha decidido rebajar el tono en su discurso contra el partido que dirige María San Gil en Euskadi. López lo expresó ayer en rueda de prensa asegurando que el socialismo vasco "toma nota del grado de miseria política y humana" a la que pueden llegar los populares en su "campaña antisocialista" de desprestigio. Pero inmediatamente les tendió la mano para que se sumen al proceso de paz.

El PSE había amagado el fin de semana con llevar a los tribunales al PP por el vídeo en el que se muestra cómo se funde el logo socialista (la rosa) con la serpiente. Y el propio López, que también amenazó el sábado con "romper relaciones" con el PP, había ordenado previamente sondear a los alcaldes socialistas con pactos de gobierno con el PP -Barakaldo (Vizcaya), Irún y Andoain (Guipúzcoa) y Labastida e Iruña de Oca (Álava)- para sopesar la posibilidad de romper los acuerdos de gobierno.

Ejecutiva en junio

Finalmente, los socialistas vascos consideran que va a ser "mucho más efectivo" la política de tender la mano al PP para que se incorpore al proceso del fin de la violencia abierto tras la declaración del alto el fuego de ETA el pasado 22 de marzo. Al menos así lo considera el núcleo duro del PSE, que ayer mantuvo una comida sin la presencia del presidente del partido, Jesús Egiguren. Un almuerzo de los habituales en la dirección socialista en el que se valoró la estrategia a seguir en los próximos meses. Una estrategia que pasa por no enturbiar la política "como pretende el PP" o por judicializarla, porque sería como reconocer el "fracaso de la propia política como espacio de diálogo, de encuentro e instrumento para resolver los problemas", en palabras de López ante los medios. Se cerraba así un discurso crítico con el PP que tuvo su primer episodio en la ejecutiva socialista celebrada el 5 de junio, en la que un miembro de la dirección ya planteó la conveniencia de "romper relaciones" con el PP después de que Ángel Acebes dijera ese mismo día que "el proyecto de Zapatero es el proyecto de ETA". Al día siguiente, López dijo que el PP había rebasado "todas las líneas rojas de la decencia política" y calificó de "infamia" las palabras de Acebes.

Mientras, la presidenta del PP vasco, María San Gil, interpretó los amagos del PSE en clave de exclusión de los populares. "Pensamos que a lo mejor en esa hora y media [de reunión PSE y Batasuna] una de las condiciones que se pusieron es romper todo tipo de relación con el PP. Ahora toca estar con Otegi y contra el PP", enfatizó la dirigente popular en la Cope. San Gil llegó a decir que la situación actual del País Vasco hace que "a muchos les venga "a la cabeza" el Pacto de Tinell, en el que el tripartito catalán excluía cualquier acercamiento al PP.

López se entrevistó ayer con el líder de Aralar, Patxi Zabaleta, dentro de la ronda de partidos. Zabaleta defendió que la mesa pueda adoptar, si no hay mayorías cualificadas, decisiones desde la mayoría, aunque respetando a las minorías. López reiteró que para construir un nuevo marco los consensos deben ser amplios.