El Carlos III amplía el servicio de vacunación internacional

El hospital público Carlos III anunció ayer que durante los meses de verano habilitará dos nuevas consultas de su Unidad de Consejo al Viajero, en las que se dará información y se administrarán "las vacunas necesarias, en el mismo centro y en el mismo día" a quienes vayan a emprender un viaje al extranjero. La vacuna contra la fiebre amarilla, por ejemplo, es obligatoria en 20 países africanos -y en otros 50 del mundo es recomendable, igual que las del tifus y la hepatitis-, pero los dos únicos centros que las dispensan en Madrid -el propio Carlos III y el centro de Sanidad Exterior en la calle de Francisco Silvela- están saturados.

Hace sólo dos semanas, un portavoz de la Consejería de Sanidad afirmaba que "la vacunación internacional es una competencia del Gobierno central y, por tanto, es a él al que hay que exigir una solución al problema". Con ese argumento, Sanidad advertía de que, pese a la saturación, la Comunidad de Madrid no tenía previsto vacunar a los viajeros en sus hospitales. Ayer, la consejería envió una nota de prensa anunciando las dos nuevas consultas en el Carlos III.

Estas consultas funcionarán, en horario de mañana, de lunes a viernes. Para pedir hora hay que llamar al teléfono 91 453 26 72 entre las nueve de la mañana y las dos de la tarde. La Unidad de Consejo al Viajero, integrada por personal de tres servicios médicos (Enfermedades Infecciosas, Medicina Preventiva y Pediatría), ofrece una atención especializada a cada paciente en función de la zona a la que viaje, el tiempo que tenga previsto estar allí y las características personales.

La consejería recuerda que los interesados deben acudir al centro un mes antes del inicio del viaje. La Unidad también aconseja al viajero en profilaxis de la malaria, una enfermedad que puede ser mortal y que puede contraerse en zonas de África, Iberoamérica y sureste asiático.

El hospital Carlos III suministró el año pasado 5.775 vacunas a personas que se disponían a viajar al extranjero, un 43,6% más que en 2004. El centro de Francisco Silvela atendió a 35.000 personas, siete veces más.