Cuatro detenidos por atropellar a sabiendas a un hombre que murió

Lo que en principio parecía un atropello accidental ocultaba un homicidio intencionado. Así lo han descubierto agentes de la comisaría de Torrejón de Ardoz, que han detenido a cuatro personas de nacionalidad nigeriana, acusados de matar a su compatriota Destiny Osemwenkhea, de 31 años, la noche del pasado domingo, según informó la Jefatura Superior de Policía.

Los hechos ocurrieron sobre las diez de la noche del domingo, cuando se inició una reyerta en la confluencia de la calle de Alicante con la avenida de la Constitución. Dos de las personas que intervinieron en la misma, Charles O., de 31 años, y Christian A., de 29, ambos de nacionalidad nigeriana, presentaban heridas incisas en un brazo y en la cabeza.

Los heridos fueron trasladados al hospital Príncipe de Asturias de Alcalá de Henares. Las descripciones de las víctimas permitieron a la Policía Municipal detener a sus dos atacantes. Se trataba de Ayo O., de 24 años, y Romeo A., de 28, ambos de nacionalidad nigeriana.

Mientras los agentes de la comisaría de Torrejón inspeccionaban el lugar de la reyerta, recibieron el aviso de un atropello ocurrido muy cerca, en la confluencia de la calle del Cristo con la plaza de España. El conductor se había dado a la fuga. Según varios testigos, se trataba de un atropello intencionado. Los agentes consiguieron algún dato de la matrícula y del modelo de coche utilizado. Era un BMW antiguo, oscuro y con cinco puertas. Según los testigos, el conductor aceleró al ver a dos individuos que huían a la carrera y atropelló a uno de ellos. Era Destiny Osemwenkhea, de 31 años.

Hacia la una de la tarde del lunes, agentes de la comisaría de Parla localizaron el automóvil en la calle de Concepción Arenal. Tenía el parabrisas roto, al igual que los dos faros delanteros. Los agentes detuvieron a Paul O., de 28 años, dueño del turismo, y a Ernest A., de 27. Los detenidos no explicaron los motivos del atropello. Los investigadores creen que los dos últimos detenidos quisieron vengarse de la reyerta y por eso atropellaron a Osemwenkhea.