Garzón permite que el PSE y Batasuna se reúnan hoy, pero pide informes a la policía

El juez Baltasar Garzón no aprecia delito en la reunión prevista para hoy de dirigentes socialistas vascos y de Batasuna y por ello no ha accedido a la petición de la asociación de víctimas Dignidad y Justicia de que prohíba el encuentro. El magistrado considera que la iniciativa parte de los socialistas, no del partido ilegalizado, y que la finalidad de la reunión no es favorecer que ETA cometa delitos sino evitar que los siga cometiendo. Además, el juez precisa que una vez celebrada la reunión se podrá calibrar si se ha quebrantado o no la ley y pide a la policía que le informe del encuentro.

El juez argumenta que establecer el posible quebranto de la ley preventivamente a la celebración de la reunión, teniendo en cuenta que la iniciativa de la misma ha sido del PSE, "un partido político legal, y sin ninguna limitación diferente a la establecida por la ley para cualquier ciudadano u organización", supondría que "el juez, se convertiría en una especie de controlador de la acción política de un partido democrático, acción que sería ilegal por contraria a derecho al exceder de las facultades jurisdiccionales de aquél".

El auto dictado por Garzón agrega que "en la convocatoria no se observa ningún elemento que induzca a pensar que, con ella, se pretende favorecer la acción delictiva del complejo terrorista dirigido por ETA, y en el que se incluye Batasuna; sino todo lo contrario, evitar que el hecho delictivo continúe produciéndose".

Garzón mantiene lo afirmado en 2002 de que Batasuna es una "estructura organizativa integrada en el grupo terrorista dirigido por ETA, habiendo sido creada para complementar su acción terrorista y hacerla más eficaz", y que "no es que se apoye o que constituya el entorno de ETA, es que al igual que las demás estructuras, forma parte de la misma, cumple sus cometidos y se identifica por sus claves".

Sin embargo, tras recordar los límites impuestos a Batasuna con su ilegalización y suspensión de actividades, señala que "tal apartado debe entenderse dentro del contexto de las resoluciones que la expresan y sus antecedentes, porque si así no se hiciera no sería posible que se realizara ningún tipo de diálogo con ninguna persona que hubiera cometido un hecho delictivo". Especialmente porque la resolución judicial que establece la suspensión es provisional, ya que no está avalada por sentencia firme, y además porque, por otra parte, "el potencial diálogo con la propia organización sería inviable".

"Es decir", señala el auto, "no puede hacerse de peor condición a Batasuna como parte integrante del complejo terrorista que a la propia vanguardia armada encarnada por ETA que dirige ese complejo". Y el presidente del Gobierno acaba de autorizar el diálogo con la dirección de la banda.

Por ello, el juez precisa que "la resolución de este juzgado no puede extenderse a la prohibición de hablar o exponer ideas que, a priori, no se sabe si tendrán contenido delictivo o no. Ello conduciría a una especie de responsabilidad objetiva que quebraría con las más elementales reglas del principio de culpabilidad penal y con el artículo 24 de la Constitución española y desembocaría en una resolución de contenido político, que es lo que quizás inconscientemente, se reclama del juzgado".

El juez concluye que si se tuvieran "elementos, datos o indicios de que lo realizado es aparentemente delictivo se actuará, pero no antes".

La reunión del PSE-EE y Batasuna se celebrará hoy en San Sebastián, en el hotel Amara Plaza a las 11 de la mañana, informa Aitor Guenaga. La delegación socialista estará formada por su secretario general, Patxi López, y el coordinador de Areas y secretario de Organización, Rodolfo Ares. La delegación abertzale estará encabezada por el portavoz de Batasuna, Arnaldo Otegi y, previsiblemente, Rufino Etxeberria y Olatz Dañobeitia.