Azkuna prioriza los planes contra la delincuencia en Bilbao

El alcalde de Bilbao Iñaki Azkuna mantuvo ayer su apuesta por la seguridad ciudadana en la capital y la "guerra al navajero", que ha posibilitado el decomiso de 250 armas blancas en los últimos cinco meses. En el primer pleno sobre el estado de la villa, el alcalde resaltó la "transformación impensable" de Bilbao. La oposición reclamó la elaboración de un plan estratégico y más atención a los barrios.

El consistorio asistió ayer a un pleno inusual hasta ahora. Tras un acuerdo tomado el pasado año, por primera vez hubo una sesión monográfica para repasar la situación de Bilbao. Azkuna lo aprovechó para repasar los proyectos en marcha y destacar la "transformación impensable" de la ciudad en unos pocos años, "cuando nuestras empresas cerraban las puertas una detrás de otra, perdiendo miles de puestos de trabajo". Agregó que la "pura necesidad" ha llevado a que Bilbao evolucione de su carácter industrial al sector servicios.

Como muestra del dinamismo de la capital, el alcalde aseguró que en los últimos meses se están promoviendo inversiones con alguna participación del ayuntamiento que superan los 550 millones de euros.

Azkuna se detuvo en los problemas de delincuencia. Opinó que Bilbao es "una ciudad segura" aunque las acciones delictivas más leves se hayan incrementado. Dijo que los delitos por lesiones o riñas han aumentado pero que habían descendido los robos tanto en los hogares como en la calle. Defendió la "guerra al navajero", que proclamó a principios de año, pero "para todos, sean de donde sean y vengan de donde vengan". Aseguró que en los cinco primeros meses del año, la Policía Municipal ha identificado a 1.500 personas y ha decomisado 250 navajas y otros objetos.

El alcalde aseguró que los ciudadanos "quieren seguridad en la calle" y citó las actuaciones desarrolladas, como la mejora del equipamiento y el aumento de la plantilla de la Policía local, la revisión del convenio con la Ertzaintza y la creación de un call center para seleccionar las llamadas urgentes.

El PP pidió la elaboración de un plan estratégico, porque "se ha puesto un coche a cien por hora pero no se sabe a dónde se dirige", señaló su portavoz Antonio Basagoiti. Reconoció el "buen hacer" de Azkuna como alcalde pero criticó la mala gestión de los concejales del gobierno y la "delincuencia creciente". El portavoz del PSE Txema Oleaga criticó la preocupación "por el cemento y el olvido de las personas" y consideró pendiente la transformación de los barrios.