El puerto de Barcelona recupera más de 150.000 metros para nuevos muelles
La zona de inflamables, que estaban en un extremo, será el nuevo centro operativo
El Puerto de Barcelona convertirá la antigua zona de inflamables, más una pastilla de terreno adjunta ganada al mar, en un nuevo muelle. Para ello, ha negociado con las empresas que tenían una concesión en este lugar para que renuncien a ella a cambio de 38 millones de euros más 1,4 millones por los beneficios correspondientes a 2005. El rescate no tiene como objetivo que el puerto opere directamente, sino abrir un nuevo concurso para usos diferentes. Ahora, apenas servían como almacén de paso y en un par de años pueden ser el nuevo centro de operación portuaria.
Los terrenos parcialmente ganados al mar junto al muelle de inflamables podrán ser aprovechados. En el momento en que se efectuó la concesión para su uso, hace ahora unos 10 años, esta zona quedaba abierta al mar y a los vientos y, por consiguiente, no podía ser utilizada como muelle de atraque para ningún tipo de buques. Ahora, sin embargo, se están realizando obras que dejarán el espacio al abrigo y, en consecuencia, se puede revisar a qué se destinan.
La Autoridad Portuaria de Barcelona ha analizado las concesiones y los titulares de las mismas, así como las duraciones de cada una de ellas. Si se divide el terreno en dos mitades con una línea imaginaria paralela al mar, la mitad más interior tiene una concesión en vigor hasta 2029. En cambio, la zona más cercana al agua está, en general, alquilada hasta 2008 o 2009, según los casos. Y en casi todos ellos, se utiliza como zona de tránsito de mercancías. La excepción es la pastilla de terreno que acogerá, si finalmente se construye, la central de ciclo combinado.
Valor estratégico
El proyecto del puerto es unificar el espacio y rematarlo con nuevos acabados ahora en diseño, lo que convierte la zona litoral en un nuevo muelle con zonas especializadas para cabotaje y las distintas formas de tránsito de mercancía.
La zona tendrá un notable valor estratégico por dos motivos: su centralidad y la cercanía a la salida al mar. Cuando se hizo la concesión, la zona no era tan céntrica. Pasa a serlo una vez se consume el desvío del río Llobregat y se efectúe la ampliación de la zona portuaria. La prolongación de un nuevo espigón desde la desembocadura del Llobregat hacia el norte hará que esta zona quede cerrada por un doble abrigo y, a la vez, en frente justo de la salida, lo que facilita enormemente las operaciones y reduce el tiempo de estancia en el área portuaria.
La recuperación de terreno no busca aumentar la actividad pública en la zona, según explicó el presidente de la autoridad portuaria, Joaquim Coello, sino que una vez esté todo en poder del puerto y reformada la zona se procederá a abrir un nuevo concurso para que operen empresas privadas.
La diferencia entre las actuales y las que acudan al concurso es, únicamente, la actividad. Cuando, hace más de 10 años, se hizo un concurso para adjudicar la concesión de los terrenos entonces existentes, era imposible construir allí una zona de muelles debido a que era una zona abierta completamente.
El conjunto del terreno suma 421.881 metros cuadrados. De ellos, 75.599 son los previstos para la implantación de la futura planta de generación. El resto de la mitad interior, hasta 247.852 metros cuadrados, son los que tenían la concesión hasta 2029. En la misma situación se hallaba una pieza central de la mitad litoral en poder de Transfesa con una extensión de 25.193 metros cuadrados. El resto estaba alquilado hasta los años 2008 y 2009.
Con esta operación el puerto aumenta su capacidad operativa y espera superar una amenaza que se cernía sobre sus operaciones de movimiento de mercancías y que amenazaban con llevarlo al colapso entre los años 2006 y 2010, según el tipo de mercancía transportado.
Una de las curiosidades del nuevo terreno ganado al mar es que se ha hecho, en parte, con las ruinas del Real Club Deportivo Español. No del club, sino del viejo campo de Sarrià, que fue dinamitado. El material de derribo fue íntegramente, sepultado en esta zona del mar de modo que se ganara un poco más de espacio para el puerto.
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