El tanatorio de Móstoles, a punto de incinerar un cadáver por error

El tanatorio de Móstoles tuvo que interrumpir ayer la cremación de un cadáver al comprobar los familiares del difunto que debía ser incinerado que su cuerpo aún permanecía en la sala de velatorios. Los familiares descubrieron el error cuando uno de ellos abandonó el lugar desde el que seguían la incineración para recoger un objeto que había olvidado en la sala donde estuvieron velando al difunto.

La mujer encontró en la citada sala el ataúd con los restos mortales de su pariente, que aún permanecían en el velatorio, por lo que alertó a los operarios de la confusión. Según informó la Jefatura Superior de Policía de Madrid, la cremación acababa de iniciarse por lo que sólo sufrió pequeños daños el ataúd, que contenía los restos mortales de otro fallecido que no debía ser incinerado.

Los familiares del fallecido que sí debía pasar por el crematorio han presentado una denuncia en la Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC), así como en la comisaría de la localidad. Preguntado por los hechos, un trabajador del tanatorio dijo que desconocía que se hubiera producido un error y que no se encontraba en las instalaciones ningún responsable de la empresa que gestiona este servicio para explicar lo ocurrido.