Interior pactó con Guinea-Bissau dar 300 euros a cada repatriado

El Ministerio del Interior pactó con el Gobierno de Guinea-Bissau la entrega de una ayuda económica de 300 euros a cada uno de los 33 inmigrantes que repatrió a ese país el viernes pasado, según confirmó a este periódico un portavoz del departamento. La entrega de dinero a los sin papeles repatriados, previo acuerdo con las autoridades de sus países de origen, es una práctica que se remonta a los tiempos en que el PP se hallaba al frente del Gobierno, según fuentes policiales.

El pago de los 300 euros fue denunciado el lunes por la Confederación Española de Policía (CEP). Este sindicato policial, próximo al PP, declaró a los diarios El Mundo y Abc que, una vez que el avión con los inmigrantes aterrizó en Guinea-Bissau, los agentes encargados de la custodia de los repatriados entregaron -"presuntamente"-, además, a las autoridades del país africano "un maletín con un contenido o cantidad indeterminada". Un responsable policial negó ayer "rotundamente" este extremo, y un portavoz de Interior dijo no tener noticia "de ningún maletín".

Fuentes del departamento que dirige Alfredo Pérez Rubalcaba explicaron que las ayudas económicas a los repatriados son pactadas habitualmente con los Gobiernos de sus países. Con ellas se trata que los inmigrantes, que han quedado arruinados tras pagar su viaje a España y regresan a Estados en bancarrota puedan al menos pagarse el regreso desde las capitales hasta sus localidades de origen.

Hasta ahora, esas ayudas rondaban los 20 euros por cabeza, cantidad ridícula en España pero que puede dar bastante de sí en África. Sin embargo, las autoridades de Guinea-Bissau exigieron en esta ocasión 300 euros, probablemente con el fin de evitar una revuelta similar a la que protagonizaron hace dos semanas 99 repatriados a Senegal. En aquella ocasión, los inmigrantes acusaron a su Gobierno de haberles "engañado y vendido", y protagonizaron disturbios en las calles de Dakar. El episodio frustró la devolución de más de 600 sin papeles que habían llegado a Canarias en piraguas.

Un país problemático

Las repatriaciones a GuineaBissau han sido siempre problemáticas. Ya en tiempos del PP, un avión cargado de inmigrantes tuvo que volver a España porque el ministro de Transportes, responsable del aeropuerto, no había sido informado por su colega de Interior. El problema se repitió en marzo y en abril pasados.

El secretario regional del CEP en Canarias, Agustín Brito, comparó los pagos de 300 euros a los inmigrantes con los 120 euros que recibió cada policía que viajó con ellos hasta Dakar. "¿A cuánto ascendió el coste real de la repatriación de los 33 inmigrantes irregulares a GuineaBissau?", se preguntó. Una fuente de Interior argumentó que "más cuesta mantener a un inmigrante en un centro de internamiento, ponerlo después bajo la acogida de una ONG subvencionada por el Estado y contribuir a su integración social con fondos públicos".