Chaves defiende una "cruzada al revés" para lograr un mundo sin luchas

El presidente de la Junta, Manuel Chaves, apostó ayer por una "cruzada al revés", una movilización "a favor de un mundo en el que nadie luche contra nadie, en el que nadie lleve su verdad al límite de avasallar al otro". Chaves hizo esta reflexión en la primera reunión del grupo español de Alianza de Civilizaciones, a la que también asistieron el consejero del rey de Marruecos, André Azoulay, y el representante de la ONU, Federico Mayor Zaragoza.

Esta red española, en cuya constitución participan más de 40 personalidades del ámbito político, cultural, periodístico, académico y diplomático, pretende apoyar los trabajos del Grupo de Alto Nivel sobre Alianza de Civilizaciones que el secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan, formó para respaldar el llamamiento del presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, y el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan.

El secretario de Estado para Asuntos Exteriores, Bernardino León, dijo ayer en Sevilla que como co-patrocinador de esta iniciativa, el Gobierno espera un informe "ambicioso, con recomendaciones y mensajes que sean realistas y que puedan llevarse a la práctica", al tiempo que resaltó que esta iniciativa tiene "vocación de acción movilizadora". "Sería bueno crear un marchamo, una patente de la Alianza", dijo León, que apuntó que habría que buscar algún instrumento que permitiera vincular las decisiones de este Grupo, no sólo con los estados, sino con la sociedad civil.

Federico Mayor Zaragoza, co-presidente del Grupo de Alto Nivel de las Naciones Unidas para la Alianza de Civilizaciones, explicó que desde el primer momento tuvieron "claro" que no deseaban que el informe que deberán entregar antes de fin de año siga "la suerte de informes precedentes que no han servido para nada", por lo que antes de su presentación y después se promoverán actividades que hagan posible el "despegue".

Señaló que es "muy importante que basemos la alianza en una clara y bien establecida igualdad", al tiempo que subrayó que es necesario el pleno ejercicio del "poder ciudadano" para que este informe no sea como los anteriores, ya que "esta vez no podemos fallar". André Azoulay, consejero del rey de Marruecos, elogió la "lucidez" del Gobierno español al promover el proyecto de la Alianza de Civilizaciones, ya que "brindó al mundo la posibilidad de poner fin a la lógica instalada en las relaciones internacionales: el choque de civilizaciones". Aseguró que esta iniciativa ha calado en el mundo musulmán, no es "un mero expediente para expertos", tras lo que, subrayó, debe desembocar en propuestas concretas. Azoulay agregó que las relaciones del islam con el resto del mundo deben ser el centro de la agenda internacional.

Uno de los retos de la Alianza, según Azoulay, es "poder explicar con conocimiento por qué ha sido posible el 11-M, cómo han podido producirse los atentados de Madrid, Casablanca y otros muchos", ya que "no podemos limitarnos a los debates convencionales de la ONU". "No hay ninguna razón para que Bin Laden sea visto como el 'campeón de las causas justas' en algunas partes del mundo musulmán", señaló.