Comerciantes y compradores abuchean a Rajoy en su visita al mercado de Collblanc

Con gritos de "no te queremos" , "eres un franquista" y "fuera de Cataluña" comerciantes y transeúntes abuchearon ayer al presidente del Partido Popular (PP), Mariano Rajoy durante una visita efectuada por el interior del mercado de Collblanc, en L'Hospitalet de Llobregat con ocasión de la campaña del Estatuto. Minutos después, Rajoy culpó de estos incidentes al Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC), durante un acto electoral celebrado con militantes del PP en un local social de La Farga, de L'Hospitalet de Llobregat. Los socialistas, a juicio de Rajoy, tratan de "buscar la confrontación" utilizando para ello a provocadores cuyo objetivo es enturbiar la visita.

Los gritos y abucheos fueron dirigidos también contra el líder de los populares en Cataluña, Josep Piqué, al que algunos viandantes acusaron en catalán de ser un "cara girada", traducido al castellano, un "chaquetero". Éste es el primer incidente que se ha producido contra el PP durante su campaña en el referéndum.

Los gritos contra Rajoy y Piqué, al principio aislados, se incrementaron a medida que avanzaban por el interior del mercado, llegando al punto álgido en el centro del establecimiento, en la sección de pescadería. Los gritos fueron proferidos en catalán y castellano. Las tenderas golpearon las bandejas de las balanzas con los cuchillos de cortar el pescado, al tiempo que insultaban a los líderes populares que cruzaban delante de sus puestos, con voces a favor de Cataluña y del Estatuto.

Salida precipitada

La algarabía provocó que la visita de Rajoy al mercado fuera acortada. Salió antes de lo previsto por una puerta lateral, rodeado por sus guardaespaldas. Una vez en la calle prosiguió, sin embargo, el griterío, al que Josep Piqué trató de poner freno, increpando a un tendero. Como toda respuesta el tendero aconsejó a Piqué. "¡Véte a Madrid a poner paz!".

La visita de Mariano Rajoy al interior de este mercado fue organizada por el aparato de propaganda del partido a última a hora, a pesar de que miembros del equipo de Josep Piqué habían aconsejado al presidente del PP que no entrara en el recinto y que efectuara sólo un recorrido por los tenderetes externos. En principio estaba previsto que Rajoy realizara una visita cultural por el barrio antiguo de Barcelona, y se detuviera en el Museo Picasso, pero se anuló esta visita y. en cambio, se programó el recorrido por este mercado popular, un sábado a mediodía.

"Vamos a defender nuestras posiciones en Cataluña y en España. Toda la gente tiene derecho a defender sus posiciones", aseguró Mariano Rajoy más tarde en La Farga ante un auditorio de militantes, al tiempo que efectuaba desde allí una proclama a través de las cámaras de televisión para que la gente se sumara a la manifestación convocada por una parte de victimas del terrorismo en Madrid, contra las negociaciones con ETA. El incidente del mercado dio pie a Rajoy para lanzar una diatriba contra los extremistas radicales, a favor de las "personas normales" y tratando de colocar a los militantes del PP en una situación de acoso.

Francesc Vendrell, portavoz del PP en el Parlament, descartó rotundamente que la visita de Rajoy al mercado constituyera una provocación. Recalcó que los abucheos habían sido programados previamente y sin culpar a nadie señaló que los socialistas estaban celebrando cerca del mercado un acto político, del que se enteraron poco antes del llegar al lugar de los incidentes. "Si hubiéramos sabido que en los alrededores del mercado estaban los socialistas celebrando un acto no hubiéramos venido", recalcó el portavoz del PP al Parlament.

Los barones del PP, desplazados a Cataluña con ocasión de la campaña del referéndum, habían evitado hasta ahora actos en la calle, con la única excepción del efectuado por Esperanza Aguirre el lunes pasado en Lleida.