Zapatero y Rajoy mantienen frecuentes contactos para que el alto el fuego se afiance

El presidente José Luis Rodríguez Zapatero evitará polemizar sobre el proceso de paz con el líder del PP, Mariano Rajoy, en el debate del estado de la nación, que se inicia mañana. Zapatero busca reafirmar el apoyo de Rajoy en una semana política clave, a fin de abrir en breve el anunciado diálogo con ETA para verificar que la decisión de la banda de dejar las armas es firme. Según fuentes gubernamentales, Zapatero y Rajoy mantienen frecuentes contactos para afianzar el alto el fuego. El PP admite la existencia de contactos.

El debate sobre el estado de la nación se produce en el momento más delicado para el proceso abierto con el alto el fuego de ETA el 22 de marzo. Coincidirá con la comparecencia en la Audiencia Nacional de ocho dirigentes de Batasuna, con el riesgo de ser encarcelados por sumarios judiciales pendientes. La formación ilegalizada ha advertido de que si eso ocurriera se paralizaría el proceso de paz.

Se sabrá el jueves, el mismo día que el ministro del Interior tiene previsto reunir el Pacto Antiterrorista para valorar si se abre ya el diálogo con la banda. De no surgir inconvenientes, el viernes se reuniría la Comisión de Secretos Oficiales, y Zapatero comparecería en el Congreso durante la próxima semana para anunciar la apertura de los contactos con ETA.

Rajoy no quiso valorar ayer esta decisión del jefe del Gobierno. Según fuentes de su partido, lo hará en el debate de mañana. En su intervención, Rajoy reiterará su apoyo a Zapatero para que abra los contactos con ETA, pero sólo para verificar que realmente la banda ha tomado la firme decisión de dejar las armas. Zapatero eludirá polemizar sobre el tema. Su apuesta es consolidar junto con Rajoy el proceso de paz. Según fuentes de La Moncloa, cuenta con la complicidad del líder del PP, con quien mantiene una relación muy fluida.