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Reportaje:

Mijatovic e Ivanovic, por la independencia

El Gobierno de Montenegro confía en que los jóvenes serán la clave para ganar el referéndum del domingo (según las normas pactadas con la UE se necesita el 55% de los votos y una participación del 50% del censo para avalar la independencia) y a ellos dedica buena parte de sus reclamos publicitarios. Hay vídeos con jóvenes modernos bailando sin parar y elípticas referencias al con el que se identifican los independentistas. Y el Ejecutivo ha logrado la colaboración de algunos de los llamados deportistas-modelo para la juventud. Pedja Mijatovic y Dusko Ivanovic -dos referencias montenegrinas en España; el primero, en fútbol; el segundo, en baloncesto- prestan su imagen a la causa.

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Mijatovic (Podgorica, 1969) ya se había aproximado en otras ocasiones al primer ministro, Milo Djukanovic. El ex jugador del Real Madrid, del Valencia y del Levante aparece en el vídeo mostrando su respaldo a la opción independentista, que de imponerse no afectará al Mundial de Alemania, en el que participa, tal vez por última vez con ese nombre, Serbia y Montenegro.

También deja claras sus preferencias Ivanovic (Bijelo Polje, 1957), entrenador del Barcelona de baloncesto y con larga trayectoria en España, primero como jugador y segundo entrenador del Girona, y después como técnico del Tau de Vitoria. Probablemente, ninguno votará el domingo porque en este referéndum no se acepta el voto por correo.

Ivanovic aceptó responder a un breve cuestionario presentado por este periódico en el que lamenta no poder ir a votar "al estar inmerso en las eliminatorias de la ACB". De poder hacerlo, como deja claro en el vídeo, optaría por la opción independentista: "Históricamente, Montenegro era un país independiente y creo que ha llegado el momento de ser un país aparte de Serbia". Y añade: "Es justo que la gente que vive en Montenegro decida lo que quiere". A Ivanovic no le asusta el futuro de un Estado tan pequeño (670.000 habitantes): "Hay otros más pequeños, como Luxemburgo, San Marino y Malta", explica. Tampoco teme que una nueva secesión en los Balcanes -la desintegración de Yugoslavia, de donde proceden Serbia y Montenegro, costó cientos de miles de muertos a principios de la década pasada- lleve mayor inestabilidad: "Creo que todos habrán aprendido de lo que pasó en la ex Yugoslavia", subraya.

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