El Clínico trasladará Obstetricia al vecino parque de Bomberos

El hospital Clínico de Barcelona verá finalmente solucionados los problemas de espacio que sufría desde hacía años por su encorsetada ubicación en pleno corazón del Eixample. El Ayuntamiento de Barcelona y el hospital firmaron ayer una permuta de solares que beneficiará a ambas instituciones: el Clínico se quedará con la finca hoy ocupada por el parque de Bomberos y el consistorio usará para equipamientos unos terrenos propiedad del hospital que años atrás albergaron el convento de las Hermanitas de los Pobres.

El convenio firmado ayer afecta a cuatro solares, el que ocupa el Clínico y otros tres situados en las inmediaciones. La finca que ocupa el parque de Bomberos del Eixample, en la calle de Provença, justo al lado del hospital, será cedido por el Ayuntamiento para que puedan trasladarse allí los servicios de obstetricia, ginecología y neonatología del Clínico, hoy ubicados en el recinto de la Maternitat, en Les Corts. La Generalitat asumirá el coste de la demolición del actual parque de Bomberos y de la construcción, en el mismo solar (de más de 19.000 metros cuadrados) de un nuevo edificio de seis plantas en el que además de Obstetricia y Ginecología se instalarán otros servicios que hoy alberga el congestionado edificio del hospital Clínico. "Esto permitirá esponjarlo", señaló el director del centro hospitalario, Joan Rodés.

El convenio establece que una pequeña parte de este nuevo edificio que sustituirá al del parque de Bomberos se reservará para que el Ayuntamiento pueda mantener allí una base zonal de este cuerpo antiincendios.

El Ayuntamiento se queda, además, con la finca que años atrás había ocupado el convento de las Hermanitas de los Pobres y que era de titularidad del hospital. El alcalde, Joan Clos, explicó ayer que en este solar, delimitado por las calles de Consell de Cent, Comte Borrell, Diputació y Viladomat, se construirán un Instituto de Educación Secundaria y apartamentos para jóvenes y ancianos, además de un área verde interior de uso público.

El convenio firmado ayer no se limita a una permuta de terrenos. Prevé también la modificación del plan especial de ordenación del recinto hospitalario del Clínico para que en él se puedan efectuar importantes obras, como la demolición del actual edificio de Urgencias y la construcción de uno nuevo en la esquina de las calles de Provença y Casanova. "Las actuales urgencias son muy antiguas y su verticalidad (funcionan en dos pisos) le restan funcionalidad", señaló Rodés. El Ayuntamiento también modificará la calificación de los terrenos situados en la calle de Rosselló en los que el hospital Clínico va a construir el Centro de Investigación Biomédica, para el que la Fundación Esther Koplowitz donó 15 millones de euros. En él trabajarán unos 300 científicos, que se sumarán a los más de 350 que hoy investigan en el IDIBAPS, ligado al Clínic y el de mayor productividad científica de España.

Se prevé que hasta 2010 no se habrán finalizado la totalidad de los proyectos incluidos en el complejo convenio firmado ayer. El coste total de esta operación de ampliación del Clínico será de 134 millones de euros (60 corresponden a la demolición del parque de Bomberos y la construcción del nuevo edificio, 50 a las nuevas Urgencias, entre otras obras en el Hospital y 24 al centro de investigación). Restando los 15 millones donados por Koplowitz, el resto del montante lo aportará la Generalitat, a la que antes de final de año el Gobierno central habrá transferido formalmente el Clínico, el único hospital que el Ejecutivo catalán no había recibido después de 25 años de tener las competencias sanitarias.

La consejera de Salud, Marina Geli, y el delegado del Gobierno en Cataluña, Joan Rangel, que firmaron ayer el convenio con el alcalde Clos, aseguraron que las negociaciones para el traspaso están muy avanzadas.