GFT pone su cuartel general en Barcelona

La tecnológica alemana GFT, empresa especializada en el desarrollo de programas para empresas, ha convertido su centro de Sant Cugat del Vallès (Barcelona) en la sede principal de la división bancaria. En dos años, GFT ha crecido un 33% en España, hasta alcanzar una facturación de un total de 37,3 millones de euros. En conjunto, la multinacional facturó 121 millones de euros en 2005.

El crecimiento del centro de SantCugat, que cuenta con 300 trabajadores, se ha hecho en detrimento de la actividad en Alemania, de donde procede la matriz. El motivo tiene que ver con los menores costes de producción y mano de obra en España, pero también con la tradición bancaria.

"Nosotros somos capaces de ofrecer mejores precios con la misma calidad, pero, además, los bancos europeos más eficientes de Europa son los españoles, y ésa es la fuente de la que nosotros hemos bebido", explica Carlos Eres, director general de GFT Iberia.

La compañía procede del ámbito bancario y se ha especializado en tecnologías para este sector tras el pinchazo de la 'burbuja digital'

Más de 50 profesionales españoles han puesto en marcha una empresa subsidiaria en Brasil para desarrollar un proyecto de Bradesco

Crisis puntocom

GFT apostó por especializarse en el sector bancario como respuesta a la globalización económica y la crisis de las puntocom, pero también porque le viene de cuna. La empresa nació del departamento de finanzas del Deutsche Bank, que los convirtió en una firma segregada y más adelante la vendió.

Hoy mide sus fuerzas con gigantes como Accenture, DMR e IBM, pero planta cara a sus rivales ofreciendo unos precios más competitivos. En España se ha hecho con clientes como La Caixa, el Sabadell Atlántico y, como no podía ser menos, el Deutsche Bank.

Además de en Barcelona, GFT tiene oficinas en Madrid, Valencia y Zaragoza con una plantilla total de 1.100 trabajadores. El centro de Sant Cugat pilotará la puesta en marcha de una filial subsidiaria en Brasil y desviará a este centro todos aquellos proyectos de menor valor añadido.

La entrada en Brasil ha venido de la mano de un importante contrato con el banco Bradesco, que requerirá entre dos y tres años de trabajo. El equipo está formada por más de 50 profesionales españoles y formados en el centro barcelonés.

La subsidiaria creada por GFT, GFT Brasil, también será la puerta de entrada de la compañpía alemana al mercado del resto de América Latina e "incluso" de Estados Unidos, según explica Carlos Eres. Según el director general, la compañía ya gestiones algunos proyectos para Nuevo York desde sus centros de España y Londres. En el futuro, la empresa tecnológica no descarta aterrizar en los países de Europa del Este.