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Alarma en Girona por el aumento de asaltos a chalets y casas aisladas

Los Mossos investigan si los robos son cometidos por el mismo grupo

Los asaltos con violencia ocurridos en los últimos meses en casas o chalets de urbanizaciones aisladas en Cataluña responden a la misma tipología del ocurrido el sábado en Palafrugell (Baix Empordà). Los asaltantes son siempre cuatro hombres encapuchados. El sábado los ladrones se introdujeron en la vivienda de un empresario de la construcción, en las afueras de Palafrugell. Cortaron la línea telefónica y amenazaron con una pistola a los propietarios de la casa, un matrimonio de más de 60 años. Este incremento de atracos ha levantado una ola de alarma y la exigencia de más seguridad.

Los atracadores de Palafrugell registraron la casa, obligaron a sus dueños a abrir la caja fuerte y les ataron para impedir que dieran aviso a la policía. Los asaltantes obtuvieron un botín compuesto por dinero y joyas. El suceso ocurrió hacia las 20.30 horas, todavía con luz diurna.

El asalto en Palafrugell, conocido ayer, es uno más de los que han ocurrido en las últimas semanas en diversas zonas de las comarcas gerundenses. No ha pasado inadvertido que todos ellos están efectuados por cuatro personas que ocultan su rostro con capuchas. Los Mossos d'Esquadra investigan los puntos en común de los robos para determinar si puede tratarse del mismo grupo.

Hace unos días, también cuatro encapuchados asaltaron con un método similar una casa en L'Escala, en la que obtuvieron unos 500 euros de botín. Entre los casos recientes, uno de los que causó mayor conmoción fue el asalto sufrido por el jugador de baloncesto del Akasvayu-Girona Roberto Dueñas en la madrugada del 19 de abril. Dueñas, que vive solo en un chalet de una zona boscosa próxima a Girona, sufrió el ataque de un grupo de desconocidos que se introdujeron en su casa y, tras amenazarlo con una pistola y un destornillador, le robaron el dinero en metálico que tenía en la vivienda. Que los cuatro asaltantes, supuestamente extranjeros por su acento, consiguieran maniatar a un hombre de 2,21 metros no ha tranquilizado a sus vecinos. El asalto, que no es el primero que se produce en la misma urbanización de alta categoría, ha causado un enorme revuelo en el complejo, que ha decidido dotarse de mayores medidas de seguridad y cerrará sus accesos por la noche.

Atracos en otras provincias

Estos asaltos tienen también puntos de contacto con otros registrados recientemente en las provincias de Barcelona y Tarragona. El pasado 24 de abril, cuatro asaltantes irrumpían en un lujoso chalet de Matadepera (Vallès Occidental). Primero amordazaron al dueño de la casa y a su jardinero, y después tomaron como rehenes a su mujer y a la hija de ésta, de cinco años. La mujer y la niña aparecieron encerradas en el maletero de uno de los coches robados de la casa.

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Unos días más tarde le tocaba el turno a Sitges (Garraf). El objetivo era la vivienda de un asesor financiero, al que sustrajeron joyas y dinero en metálico por valor de unos 180.000 euros. Los asaltantes agredieron al propietario de la casa, que requirió hospitalización.

El último asalto de estas características se conoció el martes y tuvo como escenario el barrio de Llevant de la ciudad de Tarragona, donde un matrimonio que se encontraba en casa en compañía de su hijo se vio sorprendido por tres encapuchados armados con pistola que les obligaron a vaciar la caja fuerte del domicilio.

Este tipo de delitos ha desencadenado críticas inmediatas hacia la escasa presencia de los Mossos d'Esquadra en las zonas de viviendas aisladas de Girona. La consejera de Interior, Montserrat Tura, ya aconsejó a los propietarios de las urbanizaciones aisladas, sobre todo a los que viven en las casas más lujosas, que se doten de mayores medidas de protección, como alarmas o cámaras de vigilancia.

Por otra parte, los datos de la Fiscalía de Girona certifican un incremento de robos con violencia e intimidación en los últimos años. De los 665 registrados en 2003, se pasó a los 991 de 2004 y a los 1.064 del año pasado. La variación global de los últimos tres años supone un incremento del 60%.

Fernando Lacaba, presidente de la Audiencia de Girona, apuntó ayer, durante la presentación de la memoria anual, que algunos de estos delitos podrían ser cometidos por grupos mafiosos extranjeros implantados en Cataluña durante los últimos años.

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