Aralar abre un frente judicial contra la 'Y' ferroviaria al recurrir la primera adjudicación

Dos días después de que los gobiernos central y vasco firmasen los convenios que ponen en marcha la construcción de la Y ferroviaria, Aralar anunció ayer la presentación de sendos recursos judiciales con los que intentará paralizar el comienzo de las obras en el primer tramo adjudicado. El PSE y el PP han solicitado la comparecencia en el Parlamento de la consejera de Transportes, Nuria López de Guereñu, para que detalle el alcance del convenio sobre la nueva línea férrea. La consejera ha admitido que se va "muy justo" para que el trazado esté operativo en 2010.

Aralar, que forma parte de la plataforma integrada por varios partidos, sindicatos y asociaciones contra el tren de alta velocidad, ha decidido llevar a los tribunales su oposición al proyecto. Los dirigentes del partido Patxi Zabaleta y Mikel Basabe anunciaron ayer en Vitoria que en los próximos días presentarán un recurso contencioso-administrativo en la Audiencia Nacional contra la adjudicación por el Ministerio de Fomento de las obras de construcción del primer tramo de la Y que ha salido a concurso. Se trata un segmento de 5,2 kilómetros de longitud que va desde las afueras de Vitoria hasta Legutiano. Costará 34,2 millones de euros y tiene un plazo de ejecución de 24 meses.

Zabaleta indicó que también recurrirán la licitación hecha por Fomento el 6 de marzo pasado para contratar a las empresas que controlen y vigilen la construcción de ese tramo ferroviario en Álava. Los recursos se basan, según explicó el coordinador de Aralar, en que ambas resoluciones "incumplen" a su juicio la directiva europea 18/2004, que entró en vigor el 31 de enero de este año en todos los Estados miembros, aunque todavía no ha sido transpuesta a la legislación española. Aralar sostiene que, según la normativa europea, estas licitaciones tendrían que haberse hecho mediante fórmulas diferentes a la del concurso, por lo que solicita la suspensión de los acuerdos y, por tanto, la paralización de las obras.

En cualquier caso, no ocultó Zabaleta que la motivación esencial de la iniciativa es más política que jurídica, por lo que propuso la adhesión a ella de todos los que se oponen a la Y ferroviaria y defienden una modernización de las infraestructuras "desde un desarrollo sostenible y social". Aralar invitó especialmente a los dos socios del PNV en el Gobierno, tanto a Ezker Batua, que ha mantenido una posición contraria, como a EA, a quien pide que aclare su postura.

Batasuna también se pronunció ayer para reclamar la paralización del comienzo de las obras y la apertura de un debate social sobre el modelo de transporte más conveniente. Arnaldo Otegi mantuvo que el tren de alta velocidad no soluciona los problemas en las comunicaciones, "hipoteca el futuro de este país" y sólo alimenta determinados "intereses económicos".

La cohesión del Ejecutivo

Por su parte, el PSE y el PP, que apoyan el proyecto, han solicitado la comparecencia de la consejera de Transportes para que desglose en el Parlamento los detalles de los acuerdos firmados con la Administración central para impulsar la construcción de esta infraestructura. Mediante los convenios, el Gobierno vasco asumirá la ejecución del ramal guipuzcoano de la Y, que es una obra de competencia estatal, descontándose del Cupo las cantidades que destine al proyecto. La inversión prevista es de 4.178 millones, sin contar el coste de los accesos del tren a las tres capitales. Socialistas y populares acompañaron su petición con críticas a la falta de cohesión del Gobierno respecto al trazado de alta velocidad, dada la postura contraria que mantiene EB. "Esperamos que las discrepancias en el seno del tripartito no retrasen un día más esta gran infraestructura", señaló el secretario general del Grupo Socialista, Óscar Rodríguez. A su vez, el parlamentario popular Borja Semper quiere saber si el consejero de Vivienda, Javier Madrazo, va a dimitir en coherencia con la postura de EB contraria a la Y.

En una entrevista en ETB, la consejera de Transportes aseguró que el aprobado es el proyecto más adecuado a las necesidades de Euskadi. López de Guereñu reconoció que se va con el "tiempo muy justo" para cumplir el objetivo de que el nuevo trazado ferroviario esté operativo en 2010, aunque subrayó la importancia de mantener esa referencia. En respuesta a sus opositores, la consejera subrayó que la línea, que tendrá carácter mixto (para pasajeros y mercancías), es el resultado de muchos años de estudios y "minimiza" el impacto sobre el medio ambiente. No obstante, anunció un especial esfuerzo de comunicación para hacer partícipes a los ciudadanos en el proyecto.