Rajoy pide al Gobierno prudencia y que no llame "proceso de paz" al fin de ETA

El líder del PP, Mariano Rajoy, pidió ayer al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "la mayor prudencia en el tratamiento de la lucha contra el terrorismo". Rajoy advirtió en un mitin en Sevilla de que hay que tener "cuidado con las palabras. No estamos en un proceso de paz porque no hay ninguna guerra, sino una organización terrorista que atenta contra los demás", precisó ante más de un millar de militantes populares en el Palacio de Congresos y Exposiciones. Rajoy acusó también a Zapatero de iniciar un proceso de "deconstrucción nacional y debilitamiento del Estado".

Rajoy eligió Sevilla para hacer un balance crítico de los dos años de Gobierno socialista. El líder de la oposición consideró que los mayores errores se han cometido en las políticas educativa y territorial. En esta última cuestión, anunció que el próximo martes presentará ante el Congreso de los Diputados "los cuatro millones de firmas" que su partido ha recogido para pedir un referéndum sobre el Estatuto de Cataluña.

El presidente del PP también habló del alto el fuego anunciado por ETA. "Llevamos días oyendo a miembros del Gobierno lo que están trabajando en favor de la paz algunas personas, como [Arnaldo] Otegi, y quiero recordar que forma parte de una organización terrorista y es un delincuente". Rajoy, que durante su intervención fue aclamado por los más jóvenes de su partido al grito de "presidente", reiteró que los populares apoyarán al Gobierno en materia antiterrorista, pero precisó: "Le recordamos que no aceptaremos contrapartidas políticas a una organización terrorista".

Comenzó su intervención solidarizándose con el edil de Unión del Pueblo Navarro en Barañain (Navarra) José Antonio Mendive, tras el incendio de su ferretería la madrugada del sábado, que el Ministerio del Interior achacó a la kale borroka. Pero fue prudente en su valoración: "Deseo que se aclare la autoría de este atentado".

Pero la mayor parte de su discurso se centró en los dos años de gestión del Gobierno socialista. "Lo más relevante que ha ocurrido en España es que hemos iniciado un proceso de deconstrucción nacional y de debilitamiento del Estado. El principio inspirador del PSOE ha sido menos España. Corremos el riesgo de ir hacia un Estado débil, inútil, ineficaz, con pocas competencias y con menos dinero", lamentó el líder del PP.

Rajoy calificó de "broma" el proceso de reforma de los Estatutos impulsado por los socialistas. "¿Por qué hay que suprimir la mención a la indisoluble unidad de la nación española? Lo que ocurre es que en lugar de