Bienestar Social confirmó el 44% de los 600 casos de abusos sexuales a menores que atendió durante 2005

El Servicio de Atención Psicológica a Menores Víctimas de Abusos y Menores Agresores, dependiente de la Consejería de Bienestar Social, atendió durante 2005 a un total de 600 menores y a sus familiares, incluidos menores víctimas y perpetradores, lo que supone un 15% más que en 2004. Según informó la Generalitat, del total de menores atendidos a lo largo del año pasado, 563 eran víctimas y 37 agresores. Respecto a la procedencia de estos menores víctimas de abusos sexuales, 257 eran de Valencia, 243 de Alicante y 63 de Castellón. En cuanto a los supuestos autores de abusos, 12 procedían de Valencia, 22 de Alicante y 3 de Castellón.

En el 44% de los casos evaluados se constató la presencia de abusos; en el 45% no se encontraron indicadores que presupusieran sospecha de abuso sexual, y en un 11% de los casos no se pudo confirmar ni descartar. Este servicio gratuito de la Generalitat está destinado a la prevención, diagnóstico y tratamiento de los menores de toda la Comunidad Valenciana que han sido objeto de abusos sexuales, así como a la atención y orientación de toda la familia. Según la consejera de Bienestar Social, Alicia de Miguel, la Comunidad Valenciana ha sido pionera en crear un servicio de atención al abuso infantil, iniciativa que esta empezando a ser evaluada por otras comunidades autónomas.

De Miguel ha explicado que el servicio está compuesto por ocho psicólogos y un médico, y actúa en los supuestos que tengan por base conductas sexuales sobre menores, abusos y agresiones sexuales y explotación sexual de todo tipo, y tanto si el menor es la víctima como el perpetrador. Además, en el servicio también se considera la presencia de otros tipos de maltrato infantil o negligencia. Durante 2005 se atendió a un total de 600 menores y se realizaron 256 diagnósticos, 2.294 sesiones de tratamiento y 125 informes periciales. La mitad de los menores diagnosticados requirió informe pericial. También se produjo un incremento de menores del sexo masculino respecto al año anterior, un 35% frente al 29%, que se debe al aumento de agresores atendidos.