La construcción de una 'ronda verde' permitirá recorrer en 'bici' toda el área metropolitana

Una nueva ronda verde de 72 kilómetros de longitud permitirá recorrer en bicicleta un itinerario circular alrededor de toda el área metropolitana de Barcelona. El circuito proyectado, que ha empezado ya a construirse, arranca del frente marítimo de la ciudad hasta el Fòrum, continúa hasta Sant Adrià de Besòs y Badalona, pasa por Santa Coloma de Gramenet hasta el límite con Montcada i Reixach, Collserola, Esplugues, L'Hospitalet y Montjuïc, y, de ahí, vuelve a enlazar con el punto de partida. El tramo más largo por el que ya puede pedalearse sin interrupción va de la Barceloneta a Can Zam, en Santa Coloma.

Ya está en servicio más del 60% del trazado previsto. Sin embargo, se trata de tramos parciales sin conexión entre sí, que suman 45 kilómetros. Otros 2,3 kilómetros están en obras, 18,4 más ya tienen proyecto de carril bici, y 6,2 están en estudio. Puede pedalearse sin encontrar obstáculos por 12 kilómetros en Collserola. Pero la distancia más larga que se puede recorrer sin interrupción es de 23,16 kilómetros, entre la Barceloneta y el parque de Can Zam, en Santa Coloma. Este largo tramo ya en servicio parte de la Barceloneta y continúa hasta las playas de la zona del Fórum. A pesar de no estar señalizado, el camino es practicable desde Selva de Mar hasta la calle de Sant Ramon Penyafort, donde enlaza entonces con el circuito del parque litoral de Sant Adrià de Besòs.

Desde ese punto, el ciclista puede ascender por la ribera del Besòs hasta Can Zam, en Santa Coloma de Gramenet (acortando 12 kilómetros) o bien alargar el recorrido por Badalona. En este segundo caso, la ronda verde pasa por el paseo Marítimo de Badalona y sube hasta Serra Marina, punto elevado desde donde se observa una panorámica de Barcelona poco frecuentada.

Por el parque Europa se llega a Can Zam. Las obras de la línea 9 de metro han interrumpido temporalmente el carril para bicicletas, que puede retomarse unos metros más adelante y que continúa por el paseo de la Ribera hacia Montcada i Reixac.

A falta del proyectado puente sobre el Besòs que permitirá cruzar el río, la alternativa actual es ascender algo más hasta el canal del Rec Condal y volver a bajar por el otro margen, para llegar al puente inaugurado recientemente, que permite cruzar las autopistas en Ciutat Meridiana y las vías de Renfe.

El trecho siguiente, pendiente aún de estudio, es la subida de Vallbona a Torre Baró. Desde aquí empieza el recorrido por Collserola, que, una vez completado, ofrecerá 25 kilómetros llanos por la montaña barcelonesa hasta Esplugues, con inmejorables vistas sobre la ciudad y el litoral.

Siguiendo por el carril -ya en servicio de Torre Baró a Can Ferrer- y cruzando la carretera del cementerio de Collserola, se llega a uno de los pocos lugares donde se ve todo el Vallès. Pero 1,7 kilómetros más adelante, la ronda está interrumpida por la carretera de la Arrabassada, para lo que se requiere, de acuerdo con un anteproyecto, una pasarela que enlace con la vía de Horta a Cerdanyola.

Unos kilómetros después, también se habilitará otro paso elevado que comunicará con el inicio de la carretera de les Aigües, un tramo de 12 kilómetros hoy hábil hasta Esplugues. El descenso por carril bici está a expensas de que se edifique el sector de Finestrelles, ya que el trazado figura en el proyecto que deben desarrollar los promotores del plan urbanístico previsto en la zona.

El circuito seguirá por Laureà Miró y el parque de la Solidaridad, y conectará con el carril bici existente de L'Hospitalet, que recorre los dos kilómetros de las ramblas de Just Oliveras y Marina que conducen a la Gran Via. Su continuación está en obras a lo largo de esta gran avenida. Seguirá por el paseo de la Zona Franca, en un tramo que está en estudio -es el más difícil de resolver-, y por Montjuïc, pasando por el Camí de la Foixarda, la avenida del Estadi y Costa Llobera hasta Drassanes, tal como indica el plan para este tramo, que pronto se ejecutará.