Simó y Tàrrega, premios Vicent Ventura

Fue un acto de homenaje reivindicativo en el que lo que más se reivindicó fueron los afectos. La historiadora de la arquitectura y el urbanismo Trini Simó y el distribuidor de libros, maestro, impulsor de la Societat Coral El Micalet, Enric Tàrrega, recibieron el Premi Vicent Ventura en La Nau de la Universitat de València rodeados de amigos.

El arquitecto Carles Dolç presentó a la premiada: formadora de varias generaciones de arquitectos; autora de varios libros sobre la historia de la ciudad de Valencia y de sus habitantes a través de sus edificios y de sus calles; implicada en luchas ciudadanas desde los años setenta, con El Saler, y después con el antiguo cauce del Turia, el Botànic, La Punta, El Cabanyal, Ciutat Vella, los bosques... Comprometida con la causa feminista desde la firmeza, "la discreción y la amabilidad".

Simó, nacida en Valencia, en 1935, recogió el galardón de manos del rector de la Universidad Jaume I de Castellón, y se describió a sí misma: tímida, independiente y un punto ácrata. Convencida de que el "mutismo y la falta de crítica" contribuyen a la desintegración social; y que actos como el de ayer contribuyen "a reconocer y a reconocerse como país".

El rector de la Universitat de València, Francisco Tomás, dio después la palabra a Enric Solà, jurista, encargado de presentar a Enric Tàrrega. Solà contó que entre los primeros recuerdos que guarda del premiado está el de un carro cargado de libros que conducía con varios amigos hasta la plaza Redonda, hacia finales de los cincuenta, cuando vender obras de Marx tenía algo de revolucionario y ellos tenían poco más de 20 años. Tàrrega lo describió como un hombre cordial, hablador, infatigable, nacionalista "de siete territorios", con capital en Valencia, que lucha en todas partes, mientras come, mientras duerme o cuando sube a un taxi.

Solà subió al estrado, recogió el premio y recordó a Vicent Ventura, a Joan Fuster, a Vicent Andrés Estellés y también, y por otros motivos, a Xavier Casp. Al final, expresó su optimismo respecto a la salud y al futuro del valenciano.

Solà habló de Ventura, al igual que Simó, Dolç, Tomás y Toledo para destacar el carácter "radicalmente independiente" puesto al servicio de la "generalidad de la ciudadanía" del periodista y político desaparecido en 1998. Cofundador del Partit Socialista del País Valencià y del sindicato CC OO del País Valencià, represaliado por el franquismo por haber participado en el "contubernio de Munich", el galardón que lleva su nombre fue creado en el año 2000 para distinguir la trayectoria cívica de personalidades del ámbito cultural y social. Sus promotores son la Universitat de València, la Universidad Jaume I de Castellón; los sindicatos CC OO, UGT, STEPV, la Unió de Llauradors i Ramaders y la Unió de Periodistes.

Los rectores de las dos universidades valencianas se felicitaron en sus discursos del fallo del Tribunal Supremo, conocido el miércoles, que obliga a la Generalitat a convalidar los certificados de conocimiento del catalán aprobados por los gobiernos de Cataluña y Baleares.