Nuevos trenes para Cercanías y cambios en las señales
El paso de los trenes regionales al trazado de ancho europeo ha sido presentado en los últimos años como la panacea para resolver el colapso de Cercanías. De hecho, las vías de alta velocidad eran llamadas de "altas prestaciones" porque se reservaba para ellas el paso de los AVE, los trenes de largo recorrido que en un tiempo medio serán todos de alta velocidad, al menos en teoría, y los regionales que unirán las capitales catalanas. Ayer, en cambio, el discurso fue distinto: los regionales seguirán en el ancho ibérico, de modo que para mejorar Cercanías habrá que recurrir a otras soluciones.
La primera de esas mejoras, explicó Manel Nadal, llegará de la mano de nuevos convoyes con mayor capacidad y más rápidos. La segunda, a través de la mejora del sistema de señales que limita la utilización de los túneles. Además, las reformas de Sants facilitarán que los trenes de la costa norte o sur sigan por la costa y los del interior por el interior. Ahora, por motivos históricos, en Sants deben cruzarse, lo cual entorpece el tráfico y limita las frecuencias. Estas dos medidas, más el paso al ancho europeo de los trenes de largo recorrido, tienen que permitir un incremento del 50% del servicio, a juicio de Nadal, pero de entre el 70% y el 100%, en opinión de Xavier Casas.
Víctor Morlán explicó que el Ministerio de Fomento ha encargado un estudio sobre el servicio de Cercanías en Barcelona en la perspectiva de acometer una reforma integral de las líneas. Este informe debe estar listo, dijo, a finales de este año, de modo que a lo largo del siguiente o poco más se puedan tomar las medidas oportunas para alcanzar las mejoras deseadas. Manel Nadal insistió en que para el tripartito la mejora de Cercanías es una prioridad.
