Más del 90% de las inmigrantes optan por la lactancia materna
Las mujeres de origen inmigrante que dan a luz en Cataluña eligen mayoritariamente la lactancia materna para alimentar a sus hijos, considerada la opción más beneficiosa para la salud y el desarrollo de los niños. Más del 90% de las madres de origen africano, latinoamericano o magrebí dan el pecho a sus bebés, frente al 82% de las mujeres catalanas.
Sin embargo, entre los niños de madres inmigrantes se registra mayor prevalencia de determinadas patologías relacionadas con su procedencia cultural y geográfica, como la carencia de hierro, la drepanocitosis (patología hereditaria más común en las personas de raza negra que desencadena anemia), las enfermedades infecciosas y la tuberculosis.
Así se desprende de los datos que ha recabado el Departamento de Salud sobre los alumbramientos registrados en Cataluña en 2003 de madres inmigrantes. Es la primera vez que en el registro de nacimientos, el Departamento de Salud distingue el origen de los padres. De esta forma, Salud ha podido disponer de información sobre los indicadores de salud maternoinfantil propios de los inmigrantes y ha elaborado un protocolo de atención específico para estos colectivos.
Orientar a los médicos
"No se trata de crear una red de atención exclusiva para los inmigrantes, ya que esto perpetuaría la diferencia. Lo que pretendemos es orientar a los profesionales sanitarios para detectar procesos que en estos niños son más prevalentes a causa de su origen cultural", señaló ayer la consejera de Salud, Marina Geli.
Del total de nacimientos que hubo en el año 2003 en Cataluña (73.295), el 16,7% eran de madres inmigrantes. Entre las mujeres extranjeras se dieron la mayoría (más del 40%) de los alumbramientos en edad adolescente (de 14 a 17 años), lo que es considerado un factor de riesgo para la salud de la madre y del bebé.
Aunque en determinados colectivos de madres inmigrantes, como las asiáticas, la prevalencia de la prematuridad extrema (parto antes de la semana 32ª de gestación) es significativamente alta, de los datos recogidos por el Departamento de Salud no se desprende que existan más casos de bebés prematuros entre las madres inmigrantes que entre las autóctonas.
Para los niños que han nacido en sus países de origen pero que han llegado a Cataluña en los primeros años de su vida, el protocolo del Departamento de Salud establece que sean sometidos a una exploración médica completa, que reciban todas las vacunas obligatorias en Cataluña, y que sea analizado su estado nutricional para detectar posibles patológías asociadas a déficit alimentarios".
Las madres inmigrantes utilizan en su gran mayoría la red sanitaria pública para dar a luz. El aumento de la natalidad registrado en Cataluña, gracias en gran medida a la inmigración, obligará a reordenar los servicios de maternidad de los hospitales catalanes.
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