El barrio de Remolins de Tortosa acogerá el campus de la Rovira i Virgili

El campus de la Universidad Rovira i Virgili (URV) en las tierras del Ebro se instalará en el barrio de Remolins de Tortosa (Baix Ebre), según el convenio firmado ayer por el rector de la URV, Lluís Arola; el consejero del Departamento de Universidades, Investigación y Sociedad de la Información, Carles Solà, y el alcalde de Tortosa, el socialista Joan Sabaté. El acuerdo establece que se inicien "de manera inmediata" las obras de un campus de 10.000 metros cuadrados de techo construido, en terrenos de titularidad pública situados en paraje del Hort d'en Figueres.

Las obras del campus, diseñado para acoger un millar de alumnos siguiendo las líneas de un recinto "moderno, funcional y amplio", empezarán el año próximo con una inversión prevista para esta primera fase de 15 millones de euros.

Además, se prevén "nuevas posibilidades de expansión de las actividades" hasta completar la edificabilidad total de 20.000 metros cuadrados en el campus de Remolins, y el Ayuntamiento de Tortosa adquirirá el antiguo convento de los Josepets para instalar usos y servicios complementarios.

Con esta actuación, "se conseguirá establecer un polo de desarrollo en el corazón del barrio antiguo, que tendrá como efecto potenciar el proceso de rehabilitación de esta zona", en el cual el la Generalitat y el Ayuntamiento están invirtiendo 18 millones de euros a través del Plan Integral del Casco Antiguo.

La accesibilidad al campus queda garantizada por la red viaria actual y se fortalecerá por la construcción del tercer puente previsto sobre el Ebro. El alcalde apuntó que la ubicación del campus favorece "los deseos de crecimiento de la URV y respeta las intenciones urbanísticas del Ayuntamiento de potenciar el crecimiento en la zona norte y conseguir reequilibrar Tortosa". Además, el nuevo campus se encuentra cerca del recinto ferial y deportivo, actualmente en construcción, así como del antiguo matadero, hoy convertido en un gran centro cultural,