Telefónica recibe seis ofertas por TPI y espera ingresar más de 2.000 millones

Telefónica ha recibido al menos seis ofertas para hacerse con el 59,9% de su participación en TPI-Páginas Amarillas, cuyo proceso de venta se abre oficialmente esta semana. Entre las ofertas se encuentran la de la francesa France Télécom (propietaria de QdQ), la británica Yell, la italiana Seat y tres grupos de fondos de capital riesgo. La operadora espera obtener al menos 2.000 millones de euros por su participación. El grupo ha admitido que no descarta más adquisiciones, entre las que puede figurar la compra del 50% que no controla de la brasileña Vivo. Para ello puede plantearse nuevas desinversiones en filiales como Atento, Endemol o su participación en Portugal Telecom.

Telefónica ha recibido, al menos, seis ofertas desde que el pasado 28 de febrero anunciara que ponía a la venta su paquete accionarial del 60% en TPI-Páginas Amarillas. El número de candidatos podría aumentar, ya que el plazo para la presentación de ofertas finaliza el próximo jueves.

El primero de los interesados es France Telecom, que controla las guías QdQ, principal competidor de la filial de directorios de Telefónica en España. También han mostrado interés la británica Yell, antigua filial de directorios de British Telecom, y la italiana Seat, vendida por Telecom Italia al grupo de fondos de capital riesgo integrado por Permira, CVC y BC Parners.

Además de estas tres ofertas, pujarán por TPI tres grupos de fondos de capital riesgo, entre los que se incluyen los encabezados por Apax y Carlyle y, un tercero, que puede estar integrado por Providence y Blackstone.

Todos estos grupos han estado implicados en los últimos años en los procesos de venta de las filiales de directorios que han emprendido los principales grupos de telecomunicaciones. Telecom Italia vendió Seat; British Telecom se deshizo de Yell; la sueca Telia se desprendió de Eniro; KPN-Sonera de European Directories y la noruega Telenor de Findexa. Aún conservan sus páginas amarillas los operadores controlados por el Estado como Deutsche Telekom (DeTeMedien) o France Telecom (Pages Jaunes).

El grupo presidido por Alierta espera obtener por su participación más de 2.000 millones de euros. La capitalización bursátil de TPI alcanzó el viernes los 3.491 millones de euros, por lo que la parte de Telefónica ya roza los 2.100 millones de euros. Desde el comienzo de año, las acciones de la compañía acumulan una revalorización del 34,9%.

Y es que el grupo precisa de fondos para afrontar nuevas inversiones tras la compra de la británica O2 por 26.000 millones de euros. Precisamente, el consejero delegado de O2, Peter Erskine, señaló ayer al diario alemán Welt am Sonntag que Telefónica estaría abierta a hacer más adquisiciones pese al gran desembolso realizado en O2.

Erskine, que se ha convertido en un hombre fuerte de la multinacional española tras ser nombrado consejero y asumir el mando no sólo de O2 sino también de Cesky Telecom, indicó que veía a Telefónica como una "superviviente" en una esperada ronda de consolidación de las telecomunicaciones europeas. Entre las inversiones que se le avecinan están la posible compra del 50% que aún no controla de Vivo, la mayor operadora brasileña de móviles, cuyo capital comparte con Portugal Telecom. El grupo industrial Sonae se ha mostrado dispuesto a vender esa participación si finalmente triunfa su oferta pública de adquisición (OPA) sobre Portugal Telecom, aunque cuenta con la firme oposición del Gobierno luso. La multinacional española también puede participar en la puja de Colombia Telecom.

Exigencias financieras

Otra de las exigencias financieras de Telefónica es el cierre de la oferta pública de adquisición (OPA) de exclusión sobre el 7,54% de su filial de móviles. Aunque la operación se va a realizar por canje de acciones, la operadora precisa de fondos adicionales para mantener su autocartera, de donde provendrá una parte importante de los títulos que reciban los accionistas de Móviles. Y es que, pese a la OPA, Telefónica ha confirmado su compromiso de recomprar acciones propias por 6.000 millones de euros hasta 2007..

Para reforzar la caja, y aunque la compañía guarda un estricto silencio sobre sus planes, los analistas esperan que Telefónica afronte nuevas desinversiones de activos considerados no estratégicos. Entre ellos figura Atento, la filial de atención telefónica, o la productora de televisión Endemol. La compañía también puede tener la tentación de deshacerse de alguna de sus participaciones accionariales fruto de viejas alianzas, como Portugal Telecom o BBVA.