Seguridad bajo demanda

Las infraestructuras son cada vez más fiables y facilitan el acceso a la información desde cualquier lugar. Pero la aparición de terminales todo en uno obliga a tomar nuevas medidas ante los ataques informáticos, que afectan desde los móviles a la telefonía por Internet.

La seguridad ha sido uno de los grandes temas del Cebit y una de las tendencias abordadas es la seguridad bajo demanda, que permite a las empresas proteger las estaciones remotas que no acostumbran a gestionar. Las organizaciones deben centrarse en evitar el nuevo tipo de ataques maliciosos, que se centran en las aplicaciones de salvaguarda y recuperación de la información de las empresas y en los propios antivirus y otras herramientas de seguridad, según el Sans Institute.

Los atacantes buscan más el beneficio que la notoriedad: ya no se trata de destruir datos, sino de robar información confidencial. Al menos, el 56% de las pymes han sufrido ataques informático, según un reciente estudio de Trend Micro.

En la feria se han presentado numerosas soluciones de seguridad informática, como el Network VirusWall 1200, que facilita la detección y bloqueo de virus en la información que circule por la red, cortafuegos para redes Wi-Fi como el de Netgear, dispositivos de identificación biométrica e incluso teléfonos móviles con cifrado matemático.

La seguridad también afecta a las etiquetas de radiofrecuencia (RFID), que permiten la identificación y trazabilidad de los productos. Aunque todavía no ha despegado comercialmente por el coste de las etiquetas y los lectores, la Comisión Europea aprovechó Cebit para anunciar una consulta pública sobre la privacidad y seguridad de esta tecnología.